Hola querido Henry:
Hace unas semanas que quedamos en revisar el tema de tu bilirrubina, ya veo que se nos adelantó.
Valgan estas líneas para recordarte que me sigues debiendo una cenita para ponernos al día…
Así era mi últo contacto a través de las tecnologías con mi querido amigo Henry.
Hemos trabajado juntos los últos años. Hemos vivido el cierre del diario Negocio como algo propio. Siempre rodeado de tanta gente, siempre tan solo.
Tenemos tanto lo que luchar que no pienso parar hasta que todos nuestros sueños se vean cumplidos.
He pedido a mis compañeros que brindemos que ya tenemos un nuevo reto: Promover aún más la Cátedra Enrique Alcat, llevar tu nombre allí donde se hable de Influencia y seguir contando con tus miradas de aprobación a mis ‘locuras’. Crearemos una Beca permanente con tu nombre y pondremos en marcha muchos de los proyectos los que tanto nos hemos reunido y luchado.
En nuestra empresa has trabajado con todos: cámaras, redactores, gente de la radio, de la tele… Todos te tendremos en cuenta, serás una de las deudas que adquiros con nuestro propio creciento.
Henry, querido Henry, que capullo eres y que solos nos dejas.
Te quiero. Un beso hermano.
¡Ah!, y si cuando llegues arriba, si te recibe Dios, recuerda que te debo 10 pavos de nuestra últa apuesta. ¿Testigos? Valentina y Raluca.
pedro aparicio pérez
gurú horas
fontanero de la Comunicación
director de prnoticias.com