Movistar ha ofrecido la otunidad de pisar el césped del Bernabéu a 40 jugadores anónos, procedentes de España, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Uruguay, Panamá, México, Chile, Colombia, Nicaragua, Ecuador y Reino Unido.
Estos 40 afortunados han podido hacer realidad su sueño de jugar sobre el estadio Santiago Bernabéu y poder entrenar con ocho jugadores de la prera plantilla. Esta acción, totalmente novedosa en el ámbito detivo, marca un hito pues se abre una forma nueva de relación entre los clubes de fútbol y las empresas patrocinadoras y colaboradoras.
El proyecto
Este proyecto se enmarca dentro de la estrategia corativa que busca generar experiencias únicas para clientes y empleados. Y esta vez no solo para España sino también para varios países en donde Telefónica tiene negocio y presencia.
El pasado mes de enero, Telefónica, con el apoyo del club, lanzó el Movistar Real Challenge, a través de una plataforma web que centralizaba la mecánica de participación. Para poder formar parte de este concurso los clientes inscritos, tenían que hacer todo el ruido posible en redes sociales para obtener una plaza.
Los 10.000 participantes con su actividad en redes sociales han contribuido a hacer de este proyecto un evento global con cerca de 14 millones de pactos potenciales en todo el mundo, y una web que ha alcanzado las 650.000 visitas, con más de 400.000 visitantes únicos y más de 2.000.000 millones de páginas vistas. Otra mención tante merece el éxito de los videos promocionales con más de 450.000 reproducciones que además ha obtenido uno de los premios que otorga Google a los videos más valorados en el pasado mes de febrero.
Una experiencia única
Los ganadores se han dado cita en el estadio Santiago Bernabéu donde han vivido una jornada detiva única: acceso el palco de honor, visita al vestuario del prer equipo, equipación oficial y el colofón, compartiendo entrenamiento con los 8 jugadores de la prera plantilla sobre el terreno de juego.
Movistar a través de esta iniciativa premia la fidelidad de sus clientes y pone a su servicio experiencias únicas que solo las grandes compañías pueden hacer posible. Un reto que, además, se ha hecho extensible prera vez a buena parte de los países en los que Movistar tiene presencia.