Hace tiempo que el fantasma de los recortes y la posibilidad de un nuevo ERE estaban sobre la mesa en la Cadena SER. Tras diversas negociaciones el pasado jueves la emisora de Prisa y el Comité de Empresa llegaban a un preacuerdo del nuevo Convenio Colectivo que ahora deberán aprobar los trabajadores en un referéndum que finalmente tendrá lugar este jueves 20 de marzo, antes de lo previsto incialmente.
Pero a sólo dos días de la votación no hay nada claro y nadie se atreve a posicionarse de uno u otro lado. Con la pregunta definitiva aún en el aire, la plantilla se encuentra dividida en cuanto al texto acordado entre ambas partes. Mientras algunos profesionales prefieren el nuevo Convenio Colectivo que incluiría recortes salariales del 3% al 7% desde los 20.000 euros, otra parte aboga rechazarlo y convocar movilizaciones.
Todo ello a pesar de que el fantasma de un nuevo ERE de 300 personas aún sobrevuela la emisora. La empresa ha utilizado esta medida de presión a lo largo de las negociaciones, de hecho en el preacuerdo la empresa sólo se ha comprometido a avisar con antelación al Comité la decisión de realizar despidos en el futuro. Por tanto, el posible resultado es incierto y más teniendo en cuenta la amplia estructura de una emisora que cuenta con casi 70 centros de trabajo repartidos todo el territorio nacional. Los que de nuevo no se verían afectados los recortes salariales serán las grandes estrellas de la parrilla, que incrementarían aún más su brecha con el resto de la plantilla.
En el marco de todo este proceso destaca la complicada situación de la Cadena SER con pérdidas cercanas a 7,7 millones de euros en 2013, con el desplome de los ingresos publicitarios en lo que va de 2014 y con el recuerdo del últo ERE llevado a cabo en la emisora a finales de 2011 y que supuso la salida de 258 trabajadores.
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