El popular comunicador Alfonso Arteseros ha recibido sentencia favorable en la demanda presentada contra Intereconomía TV en la que reclamaba la cantidad de 70.000 euros. Es el segundo varapalo judicial que recibe Julio Ariza del que fue una de las figuras de referencia de la televisión del toro. Con anterioridad, Alfonso Arteseros ganó otra denuncia contra el extinto periódico La Gaceta 40.000 euros.
Las demandas están relacionadas con los pagos de Julio Ariza contra el comunicador. Uno de ellos se refiere a la distribución con el fenecido diario La Gaceta –auténtica aventura equinoccial del navarro megalómano de DVD del exitoso programa “España en la memoria” de Alfonso Arteseros. Aquella promoción fue un auténtico boom y prera y única vez La Gaceta obtuvo unas ventas significativas, que superaron los 100.000 ejemplares los domingos. Sin embargo, Intereconomía nunca libró los derechos acordados de propiedad intelectual y realización con Arteseros. Éste ha llegado a declarar, con referencia a Julio Ariza que “todos los principios los que apostabas y querías que todos defendiéramos te los has saltado, todo era una mentira”. También ha calculado la cifra total de la estafa a la que ha sido sometido en 400.000 euros.
El problema ahora será que Alfonso Arteseros –cuyo programa bajo el título “España en nuestra memoria” está cosechando un notable éxito a través de TDT locales cobre realmente la cantidad establecida el Juzgado en la sentencia, mediante el correspondiente embargo. De hecho, en la sentencia anterior, referida a la demanda contra La Gaceta, ha sido hasta el momento posible incautarse de bien alguno, salvo el embargo de la marca.
Hace unos días, en la sede de Modesto Lafuente, donde está lo que queda del naufragio de Intereconomía, se personaron agentes judiciales para embargar micrófonos y materiales técnicos de las radios valor de 200.000 euros. La grave situación se solventó con el pago de la citada cantidad. Actualmente se considera que la deuda a corto plazo de Intereconomía supera los 40 millones de euros.
En las radios se están produciendo, además, movientos extraños que sugieren la existencia de una estrategia de descuartizamiento. En concreto, la marca musical, Radio Vinilo, ha pasado a ser propiedad de los directivos Luis Sans y Diego Martínez Perán.
