La noticia saltaba hace unos días publicada lamarea.com, pero no fue hasta este fin de semana cuando la indignación saltó en todos los estamentos periodísticos y sociales. Iberdrola organizó un viaje de prensa a reputados periodistas españoles para que asistieran al partido inaugural de España en el Mundial de Brasil 2014. Entre ellos, profesionales históricos y, en teoría, líderes de opinión como Melchor Miralles, Pepe Oneto, Olga Viza, Jose Manuel González Huesa, Luis del Olmo, José Antonio Vera y destacados miembros de la directiva de la APM liderados su propia presidenta Carmen del Riego.
Durante todo la mañana las críticas han llegado hasta prnoticias.com desde diversos sectores de la prensa y de compañeros de profesión. La mayoría se ha enterado en redes sociales del viaje destapado el tal lamarea.com en el que se anunciaba el desplazamiento de, en teoría, 40 periodistas españoles, para que asistieran al prer partido de España en tierras brasileñas. Iberdrola en su condición de patrocinador oficial ha cursado la invitación a decenas de periodistas, algo habitual en este tipo de grandes eventos detivos.
Es más, los mencionados profesionales que han asistido a este viaje son habituales de otras citas, también de la Selección. Lo que sin embargo ha indignado en redes y a los profesionales con los que hemos tenido ocasión de hablar, es que el viaje haya estado liderado miembros –y ex miembros de la propia Asociación de Prensa de Madrid (APM) y en concreto su presidenta Carmen del Riego.
Evidentemente estamos ante una decisión personal, aunque cuestionada desde el punto de vista deontológico. Si bien, no está prohibido el Código de la FAPE y la APM, se desaconseja aceptar este tipo de viajes que choca directamente con la independencia profesional. Con estas recomendaciones en la mano sorprende que la Presidenta de la APM acepte la invitación en un momento social sumamente delicado, y en el que este tipo de situaciones generan gran descontento e indignación, cuando precisamente se pide a la prensa que ejerza de fiscalizador de las instituciones políticas y económicas.
También sabemos que muchos profesionales incluyendo a representantes de organizaciones periodísticas sí declinaron aceptar la invitación y que también hay mucho descontento entre estas propias asociaciones la suerte de desprestigio que esta situación está generando para todo el sector.
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