La Comisión de Cultura del Congreso de los Diputados debate hoy la tarde y previsiblemente aprobará la reforma parcial de la Ley de Propiedad Intelectual. La nueva normativa refuerza las sanciones para los sitios que alojan contenidos piratas, recupera el Canon Digital tumbado el PP en 2011 e introduce la polémica ‘Tasa Google’ o ‘Canon AEDE’ con el que los editores de prensa pasarán a cobrar una remuneración equitativa la agregación de contenidos.
La reforma a la Ley de Propiedad Intelectual (LPI) ha sido duramente contestada desde todos los rincones del ciberespacio. Influencers, tuiteros, asociaciones de intet y usuarios han criticado que el Ejecutivo ceda a las presiones de la ‘industria cultural’ e ponga multas desprocionadas y nuevas tasas para proteger negocios que, según indican, pagan el coste de no haberse reinventado y de desarrollarse al margen del mundo digital.
Del otro lado las industrias de contenidos: cine, prensa, televisión e incluso los tenedores de derechos del fútbol piden que se proteja de manera más eficaz la propiedad intelectual en un ciberespacio que se ha acostumbrado al gratis total. De esta manera, la reforma que se aprobará en pleno verano y con trámite de urgencia introducirá más poder administrativo para elinar contenidos en la Red y así luchar contra la piratería.
Nada nuevo en un debate que viene de largo y en el que los internautas se han posicionado claramente contra el Ejecutivo. No obstante, la novedad es la introducción de la denominada ‘Tasa Google’ o ‘Canon AEDE’, patrocinada los editores de prensa agrupados precisamente en AEDE. El gobierno aprobará una remuneración equitativa e irrenunciable para los productores de contenidos cuyo material sea agregado en otro sitio web.
De esta manera, sitios como Menéame, Facebook o Google –e incluso los internautas si se diese el caso deberán pagar agregar contenidos a los editores. Incluso editores que no quieran recibir esta remuneración también deberán cobrarla. Para ello se deberán desarrollar las cuantías de esta tasa, la extención de los textos agregados y lo que es más tante, la entidad que deberá cobrarla y luego repartir el dinero entre los editores. En este punto se ha hablado de CEDRO, pero no está claro todavía. Cabe destacar que este canon solo afectará a los contenidos agregados, no a los enlaces que no estarán sujetos a esta normativa.
En contra de esta tasa se han posicionado editores de diario que no están agrupados en AEDE como el diario ‘20 Minutos’ y asociaciones de internautas liderados la Coalición Pro Intet. Los preros defienden su derecho a no cobrar la remuneración. En un reciente informe realizado AFI para estas entidades se advierte que el coste de la tasa tendrá un pacto de 1.133 millones para los usuarios, así como una ‘deslocalización de cientos de empresas y una tante perdida de empleos en sectores de alto valor añadido’.
Pero el Canon Aede no es lo único que se aprobará. Respecto de la lucha contra la piratería se sancionará ‘no sólo a quienes alojan contenidos ilícitos sino todos aquellos que de forma sistemática, con propósito comercial y a sabiendas, facilitan el acceso ordenado, clasificado e indexado de contenidos no autorizados para su utilización terceros’. Las sanciones incumplir la ley irán de los 30.000 a los 300.000 euros. Además, se podrá actuar sobre los anunciantes y plataformas de pago electrónico que sean mediadores de actividades ilícitas y bloquear técnicamente las páginas.
Los grupos de la oposición también coinciden en sus enmiendas en pedir que la compensación copia privada (sistema de abono de la compensación que deben recibir los titulares de derechos de propiedad intelectual la copia privada de sus obras, que sustituyó al antiguo canon digital) deje de estar a cargo de los Presupuestos Generales del Estado. Es decir, poden la vuelta del llamado ‘canon digital’ elinado el Gobierno del PP en 2011 tras ser anulado la Audiencia Nacional.
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