El causante de toda la polémica era un estudio publicado en la página de Facebook de la OCU a principios de agosto y que denunciaba que para el mismo producto cosmético se pueden encontrar diferencias de precio de hasta el 77% según la farmacia. No ocurre lo mismo en las parafarmacias: ‘es de media más barata’, asegura la OCU. Como era de esperar, esto no ha sentado nada bien a los farmacéuticos, quienes a través de sus perfiles sociales han acusado a la OCU de maquillar intereses no declarados con grandes superficies. Críticas y ataques han sido contestadas una a una, pero en algunos casos, con ‘muy poco tacto’ e insinuando conclusiones no recogidas en el estudio.
‘Dan ganas de colgar la bata’, comenta una farmacéutica tuitera a raíz del artículo publicado la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) en el que alerta de que, según la farmacia a la que entremos a comprar nuestros productos de cuidado personal, podemos encontrar una diferencia en sus precios de venta al público de hasta el 77%.
El estudio compara los productos que se venden en dos canales: farmacia y parafarmacia. Para ello se recogieron los precios de los productos más vendidos en nuestro país dentro de los segmentos de higiene oral y dermocosmética. La conclusión del estudio publicado en la revista OCU SALUD de agosto es que en las farmacias las diferencias entre precios, máxos y mínos, para un mismo producto puede ser muy grandes, en algunos productos alcanzan hasta el 77% ( ejemplo, en pegamentos de dentadura), siendo el ahorro medio entre los diferentes productos analizados de un 66%.
La Organización de Consumidores y Usuarios aconseja ‘recorrer varias farmacias antes de comprar’ y no evitarlas, pero el hecho de que a continuación asegure que las parafarmacias son un 6% de media más baratas, ha propiciado un aluvión de críticas en su contra; algo que en algunas ocasiones ha acabado con la paciencia del community manager de la organización.
A través de Facebook y Twitter, ha habido comentarios de todo tipo. En algunos se pide a la OCU la lista de farmacias más baratas, pero la respuesta es que: ‘No es un estudio tan exhaustivo como el de los supermercados, sino un sondeo de precios en el que hemos encontrado espectaculares diferencias entre farmacias. En España existen más de 20.000 farmacias…’
Hay quien solicita un estudio más a fondo. Ante esto, OCU contesta: ‘Digamos que esto era un sondeo, un termómetro de precios para ver dónde iban los tiros. Y parece que los tiros acaban dando a los de siempre… Tomamos nota de tu sugerencia para un futuro análisis menorizado’.
También hay réplica para quienes argumentan que la farmacia ‘pone los precios que puede’, que las grandes superficies ‘tienen técnicas de engaño como el producto gancho rodeado de productos caros’ o que en el estudio ‘no se tiene en cuenta el consejo farmacéutico, que es gratis’. La OCU refuta: ‘¿La farmacia pone los precios que puede? Ya… y el consumidor paga los precios que puede. Y si puede pagar menos…’.
La polémica está servida. Y seguro que al community manager de la OCU todavía le dura el dolor de cabeza, pero ¿se puede decir que su estrategia de comunicación de crisis ha sido la más adecuada?
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