Había estado en la Urbanización Parque Olpia de Ciempozuelos. Estaba ubicada al final del todo, donde el aire da la vuelta, al lado de la plaza de toros que, sin ser las Ventas, vendía aforo y espectáculo para todos los muchachos de la zona y las típicas viejas que se duermen en los encierros.
Ya comenté que había hecho mi agosto particular alquilando a una inmobiliaria que salía a la carrera sus despachos y oficinas, que se resumían en ocho pisos de noventa metros cada uno. Tenía un despacho salvajemente grande, más que los que he conocido de Luis María Ansón. Desde él intentó tirarse desnuda la ventana una joven que había sido enviada una secta satánica, alguien dijo: Venenosa. Años antes me dediqué con Pilar Salarrullana de UCD, a estudiar una secta horrorosa y conocía sus formas y maneras de actuar.
Los guardias civiles de Ciempozuelos, que hacían las rutas de vigilancia a pie, se quedaron muy sorprendidos el grado de programación que llevaba la pobre muchacha… Nunca más supe de ella, sólo quería tener un hijo mío. ¡Como las de Jesulín!
Había convencido a un empresario valdemoreño para que se trajese su Radio Alda, desde Valdemoro a Ciempozuelos. El jefe periodístico era un tal Javier Mateo Carrizo, un joven estudiante de periodismo, y un periodista desde la cuna. Gran tipo, amable, agradable, conocedor, sincero, amigo de los de verdad… pero le sentó a cuerno quemado que le quitasen la radio de al lado de su casa y se la llevasen a ¡Parque Olpia!, que insulto, que agravio… jajajajaja… al final salió de maravilla y Javier es hoy uno de los mejores radiofonistas del panorama castellano manchego, la pena es que no es político, es periodista y eso se paga.
Seguíamos repartiendo nuestro El Sur y su entorno. Los de la rotativa, que era una empresa de Germán Sánchez Ruiperez, el propietario del grupo Anaya, que había confiado la marcha de su negocio en Illescas, Toledo, a un tal José Ángel Hernández Panadero, un tipo raro, acomplejado, alto sin serlo demasiado, pero escapado de la realidad de un humano al uso. Era como una escolopendra, sí, sí… Allí prí y vi como me puteaban que había una muchacha de buen ver que pría un gratuito de 76.000 ejemplares al mes para Móstoles, y su belleza despampanante pagaba más bien nada… ¡País machista irredento! Jajajaja, que pena que yo sea bajito y feo… jajajaja…
Por aquel Parque Olpia pasaba todo el mundo, desde el retroncha de los dólares falsificados, a los alcaldes, concejales descontentos, mujeres despechadas, vendedores de psicotrópicos, guardias civiles como Vicente Soria que se vio envuelto en el turbio asesinato del etarra Zabalza, camioneros que contaban las tropelías, grueros que traían fotos de otros celebrando en Los Manueles con los Yuntas, Del Bosque y demás amiguetes las celebraciones navideñas. En éstas regalaban desde un fin de semana hasta una casa en Tragacete (Cuenca). La carretera da para mucha CORRUPCIÓN y si no que bajen a Málaga para que vean como pasan los moros. ¡Pobrecillos! He visto pelear dos empresas funerarias de Aranjuez a hostia lpia llevarse un muerto de un accidente de tráfico. A unos les había avisado la Guardia Civil, a los otros la Policía Municipal de la ciudad ribereña.
Una de las visitas asiduas a mi despacho era la de Miguel Ángel Duque, del que ya os he contado que fue el único honrado que luchó sus ideales y la decencia de un Partido Popular que daba asco, lleno de pros, tías, sobrinos, caspa que no casta. El PSOE no existía, sólo lo hacía y decidía Huete, que era el dios de todos esos apesebrados, que se contaban también familias. Otro asiduo era Paco Granados que venía con el nombre de mi hermano Luis colgando de la boca que le conocía de la Bolsa, y me pedía que le diese cuartelillo y que creyese en él. Y mientras iban y venían, no faltaba gente el camino. Muy cerca de las instalaciones de El Sur y su entorno, y nuestra radio comarcal Onda 4 (la única radio en color), que cierto se quedó Del Olmo para poner un poste y a mi me tocó echar a veinte trabajadores que hacían información local y comarcal, pero era muy tante saber que en Cataluña no había asetría lingüística. ¡Golfos! había una casa de comidas que regentaba un tal Gorila, en ella comía y cenaba con los ‘tantes’ de la zona, ellos estaban acostumbrados a otro nivel, pero a mi me gustaba llevarles al terreno de los paisanos, a comer con los dedos. Que asco, pero lo hacían de maravilla… David Marjaliza venía muchas noches a cenar conejo con patatas y ensalada, lo cierto es que estaba de escándalo, y hablábamos de la que se estaba montando en Valdemoro, y apuntaba a la necesidad de que Paco Granados no llegase a ser alcalde que se llevaría hasta los postes de las banderas. A David le interesaba que las cosas siguiesen como estaban, y que si cambiaban fuese que a él le convenía, no nada incontrolado. Pero la conclusión era acertada, Paco no podía ganar. Entre otros Rodrigo Rato apoyaba a Paco que tenía mejor nombre y reputación en el PP de Madrid, que Marjaliza casi se come a Bonifacio de Santiago que era el encargado de pueblos de Madrid… Más tarde lo sería el triste Pío García Escudero, al que dediqué un artículo titulado: ‘Pío pío que yo he sido’.
A los pocos días me senté con David y me dijo que iba a montar un partido alternativo, que el PP estaba muerto. Su tía, que tenía una óptica (Óptica Villaseñor –el segundo apellido de David) era concejala del PP en el ayuntamiento y se enfrentó abiertamente a su sobrino, con lo cual la cayó la del pulpo.
En Valdemoro hay una plaza, la Plaza de la Piña en la que hay una fuente que data de hace mucho, que más da, ese fue el elemento elegido David para poner en marcha la agen de su nuevo partido, el Partido Independiente de Valdemoro (PIV), aunque claramente dependía de él y de su entonces ‘socio’ José Huete López. A Paco se le cayeron los granos de la cara cuando vio a todas sus Nuevas Generaciones en el PIV, y a David Marjaliza Villaseñor de número uno, en una lista que claramente le anunciaba que iba a perder. Ruso y los hombres de Marjaliza actuaron como un batallón bien entrenado y en cuatro entrevistas y dos debates pusieron a Paco y su lista a la cola de las expectativas de voto.
Paco no sabía qué hacer, estaba como loco y no encontraba un motivo para tal revuelta dentro de las filas de su partido. Sabía que estaban todos los desarrollos urbanísticos hacer, y que a David éste dato no se le iba a escapar. Pero para Paco era posible pactar en ese momento con el que después sería su ‘socio’, como ha apuntado en sus investigaciones el Juez Velasco y la Policía.
Acaba de nacer el PIV, la prera ruina política de Paco Granados, que vería como su familia se quedaba con la miel en los labios. Huete era alcalde la gracia de la trampa, la compra, y el retorciento de la situación. Ahora, a la altura de la vida no nos sorprende ver regalar bolsos de Loewe a las alcaldesas de Bormujos, después de haber visto todo esto. La pena es que el delito de CORRUPCIÓN tiene que estar enca de todos los demás.
LA MALDAD DEL DÍA:
Si David Marjaliza no gastaba de lo suyo para montar el Partido Independiente de Valdemoro, y Paco Granados no era su socio ni amigo… Quién se lo financió. Está claro que fue el entonces alcalde de Valdemoro José Huete López, a éste también le debería investigar la UCO o la UDEF, que pasó de ser albañil a ser inmensamente rico, como su amigo José Bono. Pero nadie se atreve. Sólo los del PP saben como inmolarse. ¡Gilipollas!
pedro aparicio pérez
gurú horas
fontanero de la Comunicación
director de prnoticias.com