Carmen Cafranga, Presidenta de la Fundación Carmen Pardo Valcarce y el Patronato de la misma van a ejercer las acciones legales necesarias contra la Cadena SER, los autores y los diferentes medios de comunicación que han publicado y difundido una serie de informaciones, según la afectada, ‘calumniosas, sesgadas e inveraces que atentan contra su honor e agen pública’. Cafranga solicita la preceptiva rectificación y el resarcientos de daños y perjuicios, que se cederá a instituciones benéficas.
El patronato de la Fundación Carmen Pardo Valcarce y su Presidenta, afirman que es absolutamente inexacto que ‘La ex presidenta de la Fundación Caja Madrid utilizó un crédito opaco de la entidad y su ONG para un millonario negocio urbanístico‘ como dice el titular de la información publicada la página web de la Cadena Ser y firmada los periodistas Mariela Rubio y Rafael Bernardo. De ninguna manera y en ningún caso puede afirmarse que se trata de un crédito opaco, dice Cafranga, pues ha sido formalizado con la correspondiente escritura ante notario, declarado en Hacienda y está inscrito en el Registro de la Propiedad. ‘Es un crédito, concedido en 2004, que consta en las cuentas de Caja Madrid y en las de la propia Fundación, como se puede comprobar fácilmente. El Patronato considera que calificarlo de ‘opaco’ sólo tiene objetivo denigrar la agen pública de Carmen Cafranga y de la Fundación’.
Carmen Cafranga y el Patronato de la Fundación consideran que el hecho de que este crédito no figure en el Informe de Gobierno Corativo de Caja Madrid en el apartado que recoge las relaciones contractuales entre la entidad y sus consejeros se debe a que el titular de dicho crédito es la Asociación Patronato Niño Jesús del Remedio, presidida la madre de Carmen, Rosario Cavestany. Esta Asociación es la precursora de la actual Fundación Carmen Pardo Valcarce. No puede, tanto, presumirse intención de ocultar dicho préstamo parte de Carmen Cafranga.
De la información publicada la Cadena SER podría desprenderse que se trata de un crédito concedido en condiciones ventajosas a Carmen Cafranga. ‘Se trata de un crédito cualificado para viviendas de protección que se rige las condiciones aprobadas en el Real Decreto 1/2002 regulado el Ministro de Fomento. La entidad financiera que lo tramita, en este caso Caja Madrid, no tiene potestad para modificar o alterar las condiciones de dicho crédito, lo que resulta igual de ventajoso para la Fundación que para cualquier otra entidad que cumpla los requisitos de acceso a esa financiación’, indica.
El Patronato de la Fundación Carmen Pardo Valcarce y su Presidenta consideran que hablar de ‘millonario negocio urbanístico’ en relación con el uso de ese crédito hipotecario para construir 53 viviendas es una tergiversación y una manipulación de los hechos con el fin exclusivo que confeccionar una historia que ponga en duda la integridad moral de Carmen Cafranga. Las viviendas construidas forman parte del patronio de la Fundación. No pueden ser objeto de enajenación, traspaso o cesión a ningún particular sin autorización de la Administración. Cualquier revalorización de dichas viviendas es en beneficio de la Fundación, y de nadie más. El alquiler de dichas viviendas, antes como viviendas de protección oficial y en el futuro como viviendas libres, prociona fondos para el funcionamiento de la Fundación, dedicada a escolarizar, formar y ofrecer empleo a miles de personas afectadas de discapacidad intelectual, trabajo cuyo detalle está descrito en la voluminosa memoria anual de actividades a disposición de todo el público. En este entorno, hablar de ‘negocio urbanístico’, resulta cuanto menos sorprendente; insinuar veladamente que Carmen Cafranga se puede beneficiar personalmente de todo esto no es sino una muestra de la insidia y afán ofensivo que destila toda la información publicada la Cadena SER.
Respecto al alquiler de un local comercial a Caja Madrid, ha señalado ‘que no se trata de un local ‘privado’ de Carmen Cafranga, sino propiedad de la Asociación Patronato Niño Jesús del Remedio. El contrato de alquiler se hizo a precio de mercado y fue rescindido Caja Madrid en 2012. La entidad poseía en aquel entonces dos sucursales en el barrio de Montecarmelo, y llegada la crisis, fue precisamente la que estaba alquilada a la Asociación la que decidió prescindir’.
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