Dietas sin fundamento, homeopatía, biorresonancia, quimifobia o la promoción de complementos nutricionales sin aval científico son algunos de los frentes contra los que a día de hoy luchan los científicos. Denuncian que carecen de evidencia científica y que pueden llevar a que los pacientes abandonen los tratamientos indicados por profesionales sanitario o relajen la adherencia a los mismos. Por ello, el hecho de que la televisión pública promocione estas pseudociencias les ha llevado a movilizarse. La última reivindicación se materializa en una petición en Change.es.
Primero fue la campaña #nosinevidencia contra la regulación de la homeopatía. Surgió a finales del año 2013 tras la decisión de Sanidad de preparar un borrador de orden ministerial para autorizar miles de productos homeopáticos. Esto desató la polémica en Twitter. Miles de personas pedían, entre otras cosas, que no se aprobase ningún tratamiento que no haya demostrado ‘mediante ensayos clínicos reproducibles, unas condiciones de eficacia y seguridad al menos superiores a placebo’.
Meses más tarde, Mariló Montero volvía a movilizar a quienes se oponen a la difusión de mensajes pseudocientíficos. La presentadora volvía a soltar una de sus habituales ‘joyitas’. Decía que ‘el aroma de limón puede prevenir el cáncer’. Fue el detonante de un tsunami de denuncias contra RTVE; en concreto, por los contenidos de su espacio ‘Saber Vivir’, que cuenta con una media de 300.000 espectadores.
El lunes 26 de enero se envió una queja al Defensor del Espectador de RTVE, Ángel Nodal, con el respado de más de medio millar de firmas y 17 colectivos de promoción de la ciencia. Pero el responsable desoyó toda advertencia. Ante esta indiferencia, el responsable del blog Quemalpuedehacer.es, que recoge casos reales de perjuicios ocasionados por estas pseudociencias, ha lanzado una recogida de firmas virtual.
Por ahora se han recogido 2.251 firmas de las 2.500 que se pretenden conseguir para dirigirse a los responsables de TVE. ‘Merecemos un ente público que no juegue con la salud pública, y que no desprecie a sus espectadores. RTVE debe comprometerse a cuidar sus contenidos. También a disculparse y rectificar cuando se equivoque (y no a reafirmarse en el error)’, denuncia la petición.
Mariló Montero ya se ha manifestado contra ‘los chavales de Twitter’: ‘No estamos jugando a la salud. En Twitter, que escuchen bien lo que decimos y que no especulen tonterías, que aquí somos muy serios’, decía al final de su programa. Desde la dirección del mismo también defienden que se trata de ‘una corriente minoritaria de usuarios interesados en descalificar’ y aseguran que el espacio no tiene ningún acuerdo con empresas del sector para promocionar productos de ningún tipo.
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