El doctor Óscar Castro incidió en la necesidad de que, antes de abrir una nueva facultad de Odontología, las autoridades competentes deben tener en cuenta el número de profesionales que se necesitan para garantizar a la población un servicio asistencial odontológico de calidad y si la oferta educativa existente cubre de forma adecuada dichas necesidades.
Para ello, el presidente del Consejo General apuntó que lo más indicado sería que las Comunidades Autónomas realicen estudios previos exhaustivos para identificar las posibles carencias del sistema educativo universitario y que, en aquellos casos en los que hubiera que realizar ajustes en la oferta académica, éstos se lleven a cabo dotando a las facultades ya existentes de los recursos humanos y materiales necesarios, en lugar de hacerlo mediante la autorización para la creación de nuevas facultades.
Tal y como señaló el Dr. Castro, es importante adecuar la oferta y la demanda de los servicios sanitarios para que la calidad asistencial no se vea afectada. Por eso insistió en la necesidad de planificar de forma apropiada los recursos sanitarios en Odontología, limitar la creación de nuevas facultades, establecer un númerus clausus efectivo con el fin de garantizar una formación de calidad, así como adoptar unos criterios adecuados de calidad y transparencia para la formación odontológica.
El Dr. Óscar Castro recordó al Rector que en España ya hay más del doble de dentistas de los necesarios lo que está provocando que los nuevos egresados en Odontología se vean obligados a engrosar las listas del paro, emigrar o a trabajar por cuenta ajena en condiciones laborales abusivas, precarias e incluso con contratos ilícitos.
Asimismo, puso de manifiesto que España es el país de la Unión Europea donde más dentistas se gradúan. Ningún país europeo ha experimentado un crecimiento tan elevado de odontólogos como el producido en España en los últimos años. Solo entre 1994 y 2010 aumentó el número de dentistas un 104%. Además, es de los pocos países europeos donde existen facultades privadas de Odontología, dándose la particularidad de que en estas facultades hay matriculados el doble de alumnos que en las facultades públicas.