En abril de 2009 Javier Rodríguez Zapatero e Ignacio Pinedo fundaban INTERNETSIA SL, una fecha en que Rodríguez ya era director general de Google España, Portugal y Turquía desde hacía casi un año. INTERNETSIA SL nacía como un instituto de formación especializado en nuevas tecnologías. Bajo la marca Instituto Superior para el Desarrollo de Internet (ISDI) se ha ido posicionando como un instituto referencia en la formación digital especializada en empresas ¿Clientes? El propio Google en un acto que apunta a un evidente conflicto de interés.
Javier Rodríguez Zapatero recaló en Google en junio de 2008 como director general para España, Portugal y Turquía, cargo que mantiene hasta la actualidad. En abril de 2013 fundaba INTERNETSIA SL la matriz del Instituto Superior para el Desarrollo de Internet (ISDI), una empresa especializada en formación digital para empresas. Su formación más conocida es el MIB (Master Internet Business), pero cuentan con otros cursos, como el de formación de presidentes y consejeros delegados y de plantillas de estas propias empresas.
Aparentemente no estamos ante un conflicto de intereses ya que en principio Google y el ISDI no presentan incompatibilidades para Javier Rodríguez Zapatero. Esto si es que no supiésemos que entre sus muchos clientes de los cursos de formación de ISDI se encuentra paradójicamente el propio Google. El 19 de abril de 2013 Rodríguez Zapatero dejaba de ser consejero de la compañía –cargo que ostentaba desde su formación y mediante el cual cedía la gestión del día a día a Ignacio Pinedo- pero en la actualidad mantiene el cargo de presidente del Consejo Académico del instituto y es profesor del MIB.
Coincidentemente Google es uno de los clientes más importantes del ISDI como se puede apreciar en su propia página corporativa. En concreto sabemos que el buscador en España –presidido por Javier Rodríguez Zapatero– ha contratado una de sus formaciones durante el primer trimestre de 2014 para formar a sus empleados. Nos referimos al ‘Seminario Avanzado Internet Bussines’ ‘diseñados específicamente para la formación de grupos de empleadosde una empresa en torno a cualquiera de las materias impartidas por los profesores del ISDI’.
Las informaciones llegadas hasta prnoticias indican que el curso tiene un coste estimado de 250.000 euros, un valor nada despreciable considerando los precios de mercado actuales. Una situación cuando menos preocupante si consideramos que el Director General de Google en España es quien debería decidir qué cursos de formación contrata la compañía que preside. Y es sorprendente que en uso de estas facultades se decida precisamente por una empresa que él ha fundado y de la que al menos es empleado como profesor y presidente del Consejo Académico. Un evidente conflicto de interés.
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