OVIEDO. ‘Con el 2.0 ya no hay turno de preguntas, hay conversación’, es decir, se genera un diálogo y una interactuación que se caracteriza por la ‘naturalidad’ y por el empleo de una terminología que nada tiene que ver con el argot médico. En este marco, el paciente se siente más cómodo, más confiado para trasladar todas sus dudas a las asociaciones. ‘Esto genera pacientes implicados, pues saben que hay alguien detrás de ellos trabajando y generando valor’.
Así explica Nuria Zúñiga, vicepresidenta de Asociación Madrileña de Lupus de Madrid, la aportación que están suponiendo las nuevas tecnologías para las asociaciones de pacientes.
Sin embargo, en esta nueva realidad, percibe que la apuesta de estas asociaciones por la eSalud es todavía mínima: ‘Algunas asociaciones aún le tienen miedo a las nuevas tecnologías; en otras, falta interés; y en la mayoría lo que ocurre es que no hay recursos humanos ni financieros para salir al 2.0’.
La experta lamenta que estos factores repercutan en que el paciente se sienta más o menos identificado con su asociación y subraya que ‘las asociaciones deben estar donde está el paciente’.
Aprovecha para advertir que ‘el hecho de apostar por el 2.0 nunca debe llevar a renunciar al trato humano. Las Asociaciones deben complementarse con las eAsociaciones. Ambas son necesarias’, insiste.
