La Audiencia Nacional lo ha dejado todo en el aire. Después de escuchar las alegaciones de la Asociación de Futbolistas (AFE) y de la Liga de Fútbol Profesional respecto de la convocatoria de la huelga de la propia AFE que en teoría debería comenzar este fin de semana, la Justicia ha decidido dar su veredicto mañana jueves. Ni el FC Barcelona podrá saber si se proclama campeón antes de tiempo ni el resto de los clubes tienen certeza de qué pasará hasta mañana.
La telenovela de los derechos del fútbol y la venta centralizada sigue sin resolverse. Cuando parecía que estaba todo zanjado con el Real Decreto hecho público hace dos semanas, la Asociación de Futbolistas aprobó la convocatoria de huelga porque están en desacuerdo con el reparto de los porcentajes minoritarios de la futura venta centralizada. La Real Federación de Fútbol (RFEF) y Ángel María Villar, también descontentos con el reparto, apoyaron a los futbolistas.
Por su parte, la Liga presentó medidas cautelares contra la medida y hoy la Sala de lo Social de la Audiencia Nacional escuchó las dos partes al mismo tiempo que la LFP ofreció cinco millones de euros por daños y prejuicio si se paraliza la huelga. Pero han postergado su decisión para mañana.
A falta de dos jornadas para terminar el campeonato y con todo por decidir, incluyendo los puestos de descenso, los de competición europea y los del campeón, la Liga valora en 50 millones las pérdidas por cada jornada que no se juegue.
Incluso se ha valorado la posibilidad de dar por concluido el campeonato sin estas dos jornadas dejando las posiciones como están en este momento, aunque Javier Tebas ha señalado que están dispuestos a jugar en junio si es necesario para concluir el campeonato. De acabar la Liga hoy el FC Barcelona sería el nuevo campeón.
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