‘Zapeando’ cumple 400 programas en la sobremesa de laSexta asentado como uno de sus espacios de éxito y de producción propia. Altas dosis de humor, buena sintonía entre el equipo y una relación muy cercana con el espectador son algunas de las claves de su éxito. El programa celebra además este aniversario con una media en su segunda temporada del 7,2% y 895.000 espectadores, una cifra muy superior a la de su primer curso en antena. Hablamos con su presentador, Frank Blanco, para hacer balance de este periodo y conocer qué sorpresas han preparado para celebrar los 400 programas de ‘Zapeando’.
¿Qué balance haces de estos dos años de ‘Zapeando’?
Es un balance positivo sí o sí y no sólo porque hemos llegado a los 400 programas. También porque si haces la comparativa de los números del año y los de este son mucho mejores. No podemos pedir más. Estamos en buen estado de salud y parece que todavía los espectadores tienen ganas de vernos.
¿Qué vais a hacer de especial para celebrar estas 400 entregas de ‘Zapeando’?
El programa va a ser el de siempre. Coincide con un viernes, que es un día que tenemos un juego pero desconozco cuál va a ser. Lo único seguro es que me van a hacer jugar a mí y les tengo miedo porque no tengo muy claro en qué va a consiste. Sólo me han dicho que después de 400 programas voy a tener que demostrar cuánto conozco a mis compañeros y ahí se ha quedado la cosa. Y luego sí que queríamos hacer partícipes a algunas de las caras más zapeadas del programa y que formaran parte del paisaje. Hoy Antonio García Ferreras va a participar de manera muy especial y Helena Resano o Josep Pedrerol también. Además, Cristina Pedroche se viene durante todo el programa que hace mucho que no pasa un programa entero con nosotros.
¿Cuándo regresa de manera definitiva Cristina Pedroche al programa?, ¿Echáis de menos su presencia?
Eso puede pasar en cualquier momento. Yo tengo ahí su silla y el día que ella quiera volver a sentarse ahí la tiene reservada. La he echado muchísimo de menos, porque Cristina me hace reír mucho y tengo una relación muy bonita con ella. El tiempo que no ha estado se notaba que faltaba algo. Hoy va a ser especial que ella también pase esta fecha con nosotros.
¿Necesita Frank Blanco vacaciones después de tanto tiempo sin ellas?
Sí, las necesitaba y también para que mi familia no me echase de casa (risas). Todo influye, porque efectivamente el año pasado fue muy largo. Tengo dos niños pequeños y el verano pasado a su padre no lo veían mucho. Este año me he propuesto que lo vean un poquito más.
¿Habrá novedades el próximo curso en ‘Zapeando’ o si algo funciona mejor no tocarlo?
Yo suelo pensar que si algo funciona mejor no tocarlo, pero ‘Zapeando’ es un programa que continuamente está haciendo cosas nuevas. Nunca ha tenido cambios, secciones o caras nuevas, sino que vamos un poco a remolque de lo que pasa en la tele y que puede dar lugar a que nos inventemos secciones que pueden durar un día o meses. Lo mismo pasa con las caras nuevas que continuamente pasan por la mesa.
¿Qué papel juegan las redes sociales en ‘Zapeando’?
El programa no se concibe sin que todos los días les pidamos a los seguidores que nos ayuden vía Twitter con una historia, una foto o un vídeo. Creo que a los espectadores les formar parte y hacer un trocito del programa. Nosotros siempre les hacemos un hueco. Son tantos los que participan que es difícil poder mencionarlos a todos.
Dos años sin estar en la radio… ¿la tienes olvidada ya?
Es imposible tener olvidada a la radio. Es mi vocación desde pequeño. Estoy muy a gusto haciendo lo que hago y en un momento en el que no me vuelvo loco pensando quiero volver a la radio. También te digo que estamos en una época que es difícil encontrar a alguien que te haga una buena propuesta en la radio. En los dos años que llevo alejado he tenido unas cuantas, pero desconozco lo que espera el mundo de la radio de los comunicadores. Desde luego en algunas conversaciones que he tenido no han sido capaces de convencerme. Cuando vuelva a la radio tendrá que ser con un proyecto en el que crea y a día de hoy hay muchas ideas demasiado locas en la radio.
