Emiliano García Page, ya es oficialmente presidente de Castilla-La Mancha desde que el pasado sábado se celebrase el acto oficial de su investidura. Desde antes de celebrarse las elecciones, el socialista tenía claro cuál era uno de sus principales objetivos: desbancar a Nacho Villa de su puesto como director de Radio Televisión Castilla-La Mancha. Sin embargo, el que era su primer reto, se ha convertido en su primera piedra en el camino, o al menos, eso parece de momento. Nacho Villa, fiel escudero de María Dolores de Cospedal durante sus cuatro años de mandato, se resiste a abandonar su cargo, y no va a ceder su puesto hasta el último momento.
El ya presidente de la región manchega, Emiliano García Page, confiaba en que este relevo se produjese de la manera más sencilla posible y que fuera el propio Villa quien anunciase su dimisión cuando se conociera el nombre del nuevo presidente de la región. Pero nada más lejos de la realidad. Y es que Nacho Villa no tiene intención de ponerle las cosas fáciles y permanecerá en su cargo el mayor tiempo posible. Por eso García Page ha decidido delegar en su vicepresidente, José Luis Martínez Guijarro, para que sea el encargado de ejercer la presión necesaria e intentar que Nacho Villa renuncie a su puesto lo antes posible.
En el PSOE manchego sostienen, tal y como ha destacado su máximo representante en varias ocasiones, que Nacho Villa debería haber dejado su cargo desde hace semanas. Sin embargo, y ante su negativa, todo parece indicar que salvo un cambio inesperado en la tenacidad del todavía presidente del ente público, habrá que esperar varias semanas para que esto ocurra. El relevo definitivo para conocer quién será el próximo presidente de RTVCM será nombrado por una mayoría cualificada y a través de un consenso de los grupos políticos de la región, tal y como ya declaró el propio Emiliano García Page.
