Una vez más la historia se repite, y en estos casos la ausencia de noticias no son buenas noticias. Hace once días que tres periodistas españoles se encuentran desaparecidos en la ciudad Siria de Alepo. La noticia saltaba a la primera página de los diarios web en la tarde de ayer y en un primer momento se habló de un posible secuestro que afectaría a Antonio Pampliega, José Manuel López y Ángel Sastre, aunque más tarde el Gobierno puntualizaba que debía de hablarse de desaparición y no secuestro. La preocupación en el Ejecutivo es máxima y así lo demuestran las numerosas llamadas realizadas en la tarde de ayer Carmen Martínez de Castro, Secretaria de Estado de Comunicación, a los principales directores y responsables de los medios impresos y online. Martínez de Castro pidió en estas comunicaciones máxima prudencia y discreción ante las informaciones sobre la desaparición de los tres periodistas españoles.
Y es que en el Gobierno está poniendo todos los esfuerzos para que esta historia tenga un final feliz. La ausencia de noticias de los tres reporteros puso en marcha toda la maquinaria habitual de estos casos y el Ministerio de Asuntos Exteriores ya ha iniciado las gestiones pertinentes para averiguar el paradero de los periodistas españoles. Por el momento, se sabe que el pasado 11 de julio los reporteros cruzaron la frontera que une Turquía y Siria y se adentraron en la zona de conflicto. Desde entonces no se han comunicado con ninguno de sus conocidos. Muchos temen que se trate de un secuestro por parte de Estado Islámico y por tanto toda la información que se publique debe de estar medida con cuentagotas. Un simple detalle puede resultar crucial y la delicadeza a la hora de informar sobre el asunto resulta clave.
Además, a nadie se le escapa que se trata de profesionales con una amplia y reconocida trayectoria en este tipo de conflictos. Los tres son expertos en periodismo de guerra y en cubrir informaciones en zonas de conflicto. De hecho, Antonio Pampliega fue uno de los periodistas que protagonizaron el último programa de ‘Infiltrados’ que dedicaron a la yihad y a la lucha contra el ISIS en Siria. En el programa de Cuatro, los espectadores pudieron ser testigos de cómo el propio Pampliega cruzaba de forma clandestina la frontera que unifica Siria con Turquía. Las reacciones no han cesado desde que en la tarde de ayer se conociese la noticia y asociaciones de prensa como FAPE o la APM llamaron a la calma y han pedido máxima cautela ante lo delicado de la situación. Un llamamiento al que se han sumado las familias de los tres periodistas quienes han pedido paciencia y respeto en estos momentos tan delicados a través de un comunicado conjunto en el que también han afirmado que no van a realizar ninguna declaración al respecto.