Mark Zuckerberg está a punto de hacer otro de sus sueños realidad. Desde que se embarcara en el proyecto Internet.org con Facebook, con el objetivo de ofrecer acceso gratuito a internet a 4.000 millones de personas en países en desarrollo, ha estado trabajando en dispositivos tales como drones, satélites o láseres, que le ayuden a llegar a las zonas más remotas del planeta. Uno de ellos es Aquila, un dron gigante capaz de volar a una altura que ronda los 20 kilómetros. Su labor será dar acceso a la Red a los habitantes de los lugares más inaccesibles gracias a su autonomía, de hasta 90 días, y su alimentación, a través de las grandes placas solares que se apoyan en sus alas.
Facebook ha trabajado en Aquila durante todo un año y en abril de este 2015 comenzó a realizar las primeras pruebas de vuelo de este dron que tiene el tamaño de un avión de pasajeros, aunque su peso es inferior al de un coche. Unas primeras pruebas que han servido para que los técnicos lo hayan mejorado con el objetivo de que su tecnología, adquirida cuando Zuckerberg compró la compañía de drones británica Ascenta en 2014, cumpla a la perfección el objetivo de Aquila: sobrevolar los cielos para convertirse en la solución para las conexiones a internet en todo el mundo. Mark Zuckerberg ha calificado este proyecto como propio de la ‘ciencia ficción’, asegurando que, a menudo, ésta ‘es sólo la ciencia antes de su tiempo’.
Take a look inside Facebook’s Connectivity Lab – an important part of our effort to bring connectivity to the billions of people who are unconnected today.
Posted by Facebook Engineering on Jueves, 30 de julio de 2015
Además de este dron, Facebook también está trabajando en un láser que puede alcanzar una velocidad de transmisión de datos diez veces mayor a la de los estándares actuales de la industria. Un nuevo hito para esta compañía, para la que nada parece imposible. El objetivo de este otro proyecto es el de crear una red estratosférica a través de la cual se puedan conectar los aviones. Una tecnología capaz de transmitir información a 10 gigabits por segundo y 16 kilómetros de distancia.