Las series de ficción españolas están en uno de sus mejores momentos, y Cuatro quiere subirse al carro del éxito con ‘Rabia’, un thriller en el que un grupo de personas son portadoras de un virus que convierte a sus víctimas en auténticos poseídos. Con tintes de terror, hay quien puede ver similitudes de esta nueva serie con la americana ‘The Walking Dead’ o la película española ‘REC’. Sus creadores presumen de una serie de género y de haber presentado un proyecto arriesgado.
Mediaset ha decidido derivar ‘Rabia’ a Cuatro, ya que, tal y como ha explicado Manuel Villanueva, director de contenidos de Mediaset, puede adecuarse mejor al target para el que está pensada esta ficción. Desde la cadena, son conscientes del riego que conlleva este tipo de series, ya que es un producto nuevo, que nunca se ha producido en nuestro país.
Uno de los principales pilares de ‘Rabia’ es su reparto. Desde actores más jóvenes como Carles Francino (Víctor Ros), Elisa Mouliaá (Águila Roja), a veteranos como Patricia Vico, Adriana Ozores, Nuria González, Malena Alterio, Paco Tous o Concha Cuetos que forman un tándem completo que aporta intensidad a la historia. Ese amplio abanico de registros, sumado a una trama que mezcla la rama policíaca con el terror se convierte en el coctel que da fuerza a la historia.
Esos son sus puntos fuertes. Los débiles, que también los tiene, se centran en la concentración de una historia densa en ocho únicos capítulos. Además, Cuatro tiene el reto de convencer a la audiencia, que está acostumbrada a importar este tipo de formatos desde Estados Unidos, para que se adentre en un mundo de ‘zombis’ a nivel nacional. Para ello han querido extraer la esencia de películas como ‘El amanecer de los muertos’ y ’28 días después’ para adaptarlas a una serie de ficción española que se ha convertido en ‘Rabia’.
En poco más de dos semanas, llegará a Cuatro esta innovadora apuesta para que el público español logre convencerse y se ‘infecte’ de ‘Rabia’. Será una primera temporada, formada por ocho capítulos, que no tendrá un final cerrado para no descartar una segunda temporada.