¿Qué redactor, despedido durante este año, está aprovechando que las cosas están más calmadas y nadie va a sospechar de él para dedicar todo su tiempo libre a llamar a las compañías que ponen publicidad en el que era su medio y explicarles los ‘horrores’ a los que eran sometidos sus compañeros y él con el objetivo de que dejen de colaborar con ellos?