He tenido varios coches de la marca Wolkswagen de gasoil, y todos ellos echaban humo negro como los demás, la diferencia es que las averías costaban el triple y la atención no era para morirse. Antes de la última revisión le tuve que cambiar a mi flamante VW Golf, el turbo y a otro de mi hermano Carlos el no sé qué, pero costó un dineral…
Pero lo más ‘divertido’ que he vivido con la marca SEAT, AUDI, VOLKSWAGEN (VW) es cuando mandamos a una redactora a cubrir una información sobre una presentación en Andorra de unos Audi. La invitaron a montar en unas motos de nieve y nuestra compañera se estrelló… ¿Imprudencia? Seguro. ¿Falta de previsión por parte de VW? Toda. ¿Y los propietarios de las motos, y sus seguros?… La compañera presentó papeleta en Trabajo y le dieron vista. Mi abogado acojonado decía: ‘No está claro, tendré que estudiarlo los próximos meses’… jajajajaja. Era tan fácil como citar al presidente de VW y rápidamente empiezan a aparecer pólizas de todas las compañías suizas, y lo tienen que aplazar porque el Presidente de VW no había venido, para no venir desde Barcelona es tan fácil como indemnizar a quien se le hizo el daño, y después… Continuar fabricando motores que nos maten de contaminación pero que queden muy bien en las ITV´S…
120.001
Ese será el refugiado que se quedará fuera del grupo de refugiados a los que estamos esperando desde hace semanas. 120.000 ha decidido la UE, ni uno más… Y los que entran por otras fronteras más aéreas o vienen a través de otros medios, esos que huyen de Maduro, de sus guerras y de su puta dictadura, ¿estos no son refugiados? Que se lo pregunten a los periodistas de VenezuelanPress. Se ponen las cartas encima de la mesa, mientras los americanos y los ingleses se frotan las manos viendo como la vieja Europa es invadida por el islamismo y nadie hace ni dice nada… ¡Esto sería fascismo! ¿Cuántos refugiados vinieron de la guerra de Irak a Europa? Me vale con esa respuesta. Por supuesto, hay que ayudarles, ofrecerles la hospitalidad necesaria… Y, ¿cuándo acabe la guerra?…
LA HISTORIA DEL DÍA
Seguía sin descolgar el teléfono. Ella se había reído y me había dicho donde vivía, eso sí si respetaba al que tiene un nieto en las inglaterras de Isabel Pantoja. Mientras se bañaba en Cancún las cosas iban a las mil maravillas: ‘Papá soy feliz’ y, ‘al veros así más’. Él frotaba su cornamenta aseada contra las escaleras de salida de la piscina. El sicario había contado los escasos cien dólares que le pagaban por matarla. Sólo tenía que apretar el gatillo, y no le importaba. Esos cien dólares le servirían para estar una semana completamente colgado, y dar cuartel a dos o tres de la banda. Estaba claro: ¡Quería volver a la tierra del tequila a descansar en paz en cualquier cruce de calles! ¿Su hermanito? Menudo hijo de puta en A3, se le olvidó que la tenía cuando consiguió lo que quería…
¡Hay pipas, chicles, cocacola, helados!
A volar con Iberia…
