Ha sido un hecho insólito en la historia de ‘El País’. El buque insigne de Prisa se ha visto casi obligado a publicar una información en la que detalla la indignación de muchos de sus lectores respecto a las noticias y artículos publicados en el diario sobre las Elecciones al Parlamento Catalán. Las protestas han quedado plasmadas a lo largo de una página entera de la edición en papel de ‘El País’ y de la reproducción del artículo en su versión digital.
La defensora del lector, Lola Galán, ha explicado que pese a salirse de su ámbito de actuación el periódico debía dejar constancia del malestar de sus seguidores respecto a las Elecciones Catalanas, no por la cobertura ofrecida sino por muchos de sus artículos de opinión publicados en ‘El País’ a lo largo de estas semanas previas a los comicios. Galán justifica en primer lugar que la cobertura fue correcta y que el diario redobló sus esfuerzos para cubrirlos con seis redactores extra y más de 1.300 artículos publicados.
Sin embargo, la indignación de los lectores de ‘El País’ ha venido sobre todo enfocada hacia la línea ideológica marcada por muchos de los artículos de opinión sobre las Elecciones Catalanas. Numerosos lectores consideraban que el diario debería de haber publicado más opiniones técnicas basadas en estudios y razonamientos de personas cualificadas acerca de la secesión. Pero dos han sido los artículos que más ampollas han levantado.
Por una lado ‘Independencia: siga la flecha’, publicado el 11 de septiembre en ‘El País’ con motivo de la Diada y por otro lado ‘Desmadre a la catalana’ del 28 de septiembre. El primero ha sido considerado por los lectores como un texto impropio de la cabecera de Prisa al insinuar en sus líneas el autor que los manifestantes asistentes habían consumido marihuana. En el caso del segundo artículo escrito por John Carlin las quejas llegan por su uso peyorativo del término ‘madrileñito’, lo que podría fomentar el odio o la incomprensión.
Lola Galán reconoce que las críticas se han disparado significativamente por las Elecciones al Partlamento Catalán y ha apuntado que los editoriales también han sido centro de la indignación de los lectores. Para algunos seguidores de ‘El País’ no es correcto que desde la páginas del diario se pidiera de manera tan abierta el voto para los partidos contrarios a la independencia.
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