La mala prensa que siempre ha rodeado a los transgénicos ha generado que haya un amplio sector de la sociedad desinformado que, a día de hoy, sospecha de la seguridad de estos productos que han sido modificados genéticamente con el fin de resistir a virus o de mejorar patrones alterados en el organismo humano. Son miedos infundados. No responden a ninguna evidencia científica. Pero existen y están provocando un enfoque hermético que obstaculiza que empiecen a asomar los primeros brotes de empatía por parte de la sociedad hacia la biotecnología, una ciencia milenaria que ha perfeccionado procesos de elaboración de productos tan cotidianos como la cerveza. Ante este panorama, periodistas y expertos en Comunicación Científica han lanzado una serie de recomendaciones que pueden ayudar a luchar contra el problema de Comunicación generado alrededor de la biotecnología. Lo han hecho durante el VI BioEncuentro con Medios 2015 celebrado en Madrid en el marco de la Semana europea de la Biotecnología.
1. Distinguir entre comunicación y divulgación. Carmen Vela, secretaria de Estado de Investigación, Desarrollo e Innovación, reconoce que ‘una sociedad mejor informada es más igualitaria’; pero también insiste en que debemos aprender a distinguir entre comunicar y divulgar: ‘Los periodistas informando y entre todos divulgando, tenemos una gran tarea por delante’. En esta ocupación, el periodista tiene una tremenda responsabilidad. José Antonio Plaza, periodista en Diario Médico, describe que ‘la biotecnología es un término muy amplio, lo que facilita la labor del periodista, pero también la dificulta: le obliga a bajar al barro para comunicar bien’.
2. Comunicar la biotecnología desde un nivel básico y sin pretender metérsela a la gente en vena. Óscar Menéndez, comunicador científico y director de Explora.com, es claro al respecto: ‘Necesitamos más cerveza y menos transgénicos’. Propone explicar la biotecnología a un nivel más básico para que llegue a la sociedad. ‘Quizá se deba empezar por hacer entender lo que es un yogur y más adelante intentarlo con lo que es un transgénico’, plantea. Ángela Bernardo, redactora de Hipertextual, se muestra de acuerdo: ‘Más allá de los debates científicos, hay una falta de cultura científica de base que deberíamos resolver’. A esta cultura alude Emilio Muñoz, presidente del Comité Científico de ASEBIO: ‘La biotecnología es tanto para la vida que debería ser básica en el sistema educativo y no se debería consentir que alumnos universitarios no hayan oído hablar ni de política científica ni de biotecnología’.
3. ¿Mayor especialización periodística o una buena agenda?. ‘Debido al declive que han vivido los medios de Comunicación como consecuencia de la crisis económica, el periodista se ha convertido en un informador que tan pronto cubre deportes como ciencia. Pero además, esta falta de recursos humanos ha provocado que sea cada vez más difícil encontrar noticias sobre ciencia o sobre biotecnología en la prensa generalista’. De este modo hace hincapié Sara Cebrián, directora de Comunicación de MSD, en la importancia de la especialización en salud. No se ha mostrado de acuerdo con ella Antonio Calvo. El presidente de la Asociación Española de Comunicación Científica opina que ‘un periodista necesita más agenda que conocimiento’.
4. Buscar una fuente científica clave que ayude al periodista a ‘traducir’ la información. La secretaria de Estado de Investigación, Desarrollo e Innovación, Carmen Vela, hace reflexionar sobre un aspecto clave: ‘En ciencia no solo hacen falta grandes científicos, que en España los tenemos, sino trabajar junto a los periodistas’. Emilio Muñoz, presidente del Comité Científico de ASEBIO, añade que en biología hay ‘términos muy difusos’ que cuestan comprender hasta al periodista más especializado. En este sentido, se propone seleccionar una fuente de información clave que ayude al periodista a entender la información científica. ‘Hemos avanzado mucho en la comunicación de la biotecnología, pero el fallo de cualquier eslabón de la cadena dificulta todo el proceso’, recuerda Ángela Bernardo, redactora de Hipertextual.
5. Formar al científico en habilidades comunicativas. El periodista José Antonio Plaza señala que ‘los científicos divulgan más de lo que lo hacían hace unos años porque han entendido que si no comunican, pierden mucho valor’. Sin embargo, todavía queda mucho trabajo por hacer. Quedan muchos profesionales por convencer de la importancia de tener a su lado un departamento de Comunicación que comunique o interprete la información de forma rápida. ‘Es importantísimo que alguien le explique al periodista lo que éste quiere contar’, comenta. Y es que el periodista ‘cuenta cosas que no controla’. En esta línea, Alba Soler, directora de Comunicación de Bioibérica, destaca que ‘comunicar la biotecnología es tan importante como desarrollarla’.
6. Generar información que reabra el debate. Ante los problemas de desinformación que afectan a la biotecnología, como pueda ser el de los transgénicos, ‘lo único que podemos hacer es dar la información fiable y contrastada a la sociedad para que conozcan lo que realmente es la biotecnología y se reabra el debate’, ha planteado José Antonio Plaza, miembro de la Asociación de Comunicadores de Biotecnología. Sobre este eje gira también la opinión de Regina Revilla, presidenta de ASEBIO: ‘Hay que apostar por la ciencia y por el debate para que la sociedad del futuro pueda sobrevivir’.
