Cuando muchos apostaban por la pérdida de tirón de Pablo Iglesias como personaje mediático tras un periodo de ‘retiro’ de la primera línea, el político ha vuelto por todo lo alto como parte de su campaña de cara a las Elecciones Generales de 2015. El líder de Podemos se sentó de nuevo anoche junto a Risto Mejide -esta vez en otra cadena y en otro formato- aunque el resultado fue el mismo: récord de histórico de share de ‘Al Rincón’ (Antena 3) y de espectadores en su segunda temporada. El formato registró un 12,4% de cuota de pantalla y 998.000 espectadores con la entrevista de Iglesias y la de la actriz Carmen Maura.
Pablo Iglesias ya otorgó en 2014 a Risto Mejide otra alegría cuando marcó el máximo histórico de ‘Viajando con Chester’ (2.823.000 espectadores y un 14,5%), una cifra que no fue superada antes de la marcha de Mejide del formato de Cuatro ni posteriormente por su sucesora Pepa Bueno. La conclusión, por tanto, es que Pablo Iglesias recupera poco a poco su cuota de protagonismo en televisión y busca mantener el tirón mediático que le llevó en gran parte al éxito entre los electores.
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El líder de Podemos protagonizaba este martes en late night una conversación con Risto Mejide que por minutos estuvo subida de tono, cosa que permite el horario del formato. Pablo Iglesias ha confesado que ‘procura follar durante la campaña’ tras ser cuestionado por el publicista acerca de sus continuas alusiones al sexo durante la campaña electoral. El político ha añadido abiertamente que ‘follar es una cosa imprescindible’ y asegura que en campaña le gusta ‘atravesar los límites convencionales. Todo lo que sea erotizar la campaña electoral, a mí me pone’.
Estas declaraciones de Pablo Iglesias han encendido las redes sociales al minuto, al ser algunas de las más personales confesadas por el líder de Podemos desde que saltó a la vida política española. Sin embargo, Iglesias quiso dejar claro que pese a su sinceridad una cosa es tratar públicamente el tema del sexo y otra es hablar de su vida privada. el político tampoco ha dejado pasar la ocasión para hablar de algunos de sus rivales como Albert Rivera o apuntar que ‘González y Aznar son como drogadictos que necesitan tener presencia pública’. Pablo Iglesias ha vuelto sin pudor, pero con límites.
