El pasado mes de junio, la Unidad de Reproducción del Hospital Moncloa, en Madrid, anunciaba la adquisición del sistema Eeva™ (Early Embryo Viability Test) como resultado de su política de innovación y mejora continua de recursos y procedimientos. Tras su instalación, el equipo de embriólogos de UR-Moncloa ha sometido el sistema a un proceso de pruebas y ensayos para ajustar todos los elementos –incluidos los nuevos incubadores– que intervienen en la selección y desarrollo embrionarios, con el fin de realizar una primera valoración de los resultados.
Eeva™ supone un salto cualitativo en las técnicas de reproducción asistida, concretamente en la selección embrionaria, una fase crucial en los tratamientos de fecundación in vitro que condiciona, notablemente, la posibilidad de éxito en la posterior transferencia y desarrollo en el útero materno.
En opinión de Pablo Alberola, responsable de laboratorio de UR-Moncloa, ‘estamos en disposición de dar un gran salto cualitativo en la mejora de la selección embrionaria con una técnica time-lapse tecnológicamente puntera’. Una de las ventajas de Eeva™ –según explica Alberola– es que ‘permite el estudio cinético de la división celular, de forma que además de mejorar las condiciones ambientales de los embriones en cultivo y mantenerlas constantes a lo largo de ese tiempo –pues se minimizan los cambios puntuales que pudieran darse por el hecho trasladar el embrión al microscopio para su valoración visual– se mantiene un control sobre el desarrollo del embrión que no podría realizarse sin un dispositivo de seguimiento de esta índole’.
Además, este sistema de selección embrionaria permite el visionado del embrión en todas sus etapas gracias al scope (cámara) y a un potente software que opera con un algoritmo y miles de datos y resultados embrionarios que respaldan la elección de transferencia en primera instancia de una forma más objetiva, aunque la decisión final siempre la tiene el embriólogo.
Para la Dra. Carmen Segura, directora médica de UR-Moncloa, ‘gracias a este tipo de técnicas, ante una apariencia o clasificación visual que se describe en un momento puntual del ciclo embrionario, podemos mejorar la efectividad de los tratamientos de reproducción asistida añadiendo lo que la tecnología y su desarrollo puede poner en nuestras manos a la hora de valorar la capacidad de implantación que tiene un embrión’.