La tecnología es la madre de este Siglo XXI. Es un hecho más que demostrado. El problema, o la bendición según desde que prisma se mire, es que su actualización continua hace que sean tendencia a diario, por lo que no podemos casi ni parpadear sin perdernos un nuevo cambio. Esto ha hecho que, Gartner haya querido destacar, de entre todas ellas las 10 que, bajo el paraguas del valor estratégico, destacaran en 2016 dentro de las empresas. Esta semana, abrimos las puertas de las 5 primeras, que son:
- Red de dispositivos: el uso de estos es mayor a cada día que pasa. Son el nexo con la información que consumimos a diario, además de la mejor vía para realizar negociaciones, en lo que a marcas se refiere. Un crecimiento que ha explotado de forma definitiva con la aparición de los wearables y con la mayor relevancia del Internet de las Cosas… Y con la amplitud de mitas que han ido adquiriendo las empresas.
- Experiencia ambiental de usuario: la cual tiene su punto álgido en la realidad virtual y la aumentada, aunque no sean experiencia envolventes por completo. Y es que, lo que se busca es que el usuario disfrute de la experiencia más allá de los dispositivos, el espacio y el tiempo. ¿Se conseguirá?
- Material de Impresión 3D: muchos son los sectores que se pueden aprovechar de esta nueva tecnología, aunque los que más hincapié están haciendo son el aeronáutico o el sanitario. De hecho, tal es el crecimiento del mismo, que se prevé que, de media, aumente un 65% hasta 2019.
- Información de ‘Todo’: todo elemento digital es capaz de producir, transmitir y, por último, usar la información generada. Si, además, se lleva a cabo una buena estrategia empresarial, el resultado puede ser muy bueno. De hecho, en muchas ocasiones, el reporte de beneficios es superior al esperado. ¿A que estamos esperando para ponernos con ello?
- Aprendizaje avanzado – Inteligencia artificial: este sector está llegando al punto de ser capaz de dar vida a máquina que pueden comprender el entorno en el que se mueven y, lo que es más llamativo, hacerlo de manera independiente. Todo gracias a las DNN, o redes neuronales profundas. Un avance que ha podido nacer y crecer gracias a la clasificación y análisis de datos.
