El espacio presentado por Bertín Osborne está de enhorabuena. No sólo es lo más visto de la noche de los miércoles, si no que ha conseguido un nuevo récord de temporada gracias a su entrevista al dúo cómico Los Morancos, quienes congregaron a casi 4 millones de espectadores. Y para celebrar estos buenos datos, ‘En la tuya o en la mía’ ha contado con la presencia de Adolfo Suárez Illana en la que es la entrevista más emotiva realizada hasta la fecha.
Adolfo Suárez Illana se convirtió en un espectador de la vida de su padre y de lo que significó para España. ’Mi padre tenía un cargo público y lo ejercía’ y su trayectoria política estuvo marcada por el derrumbe de Los Ángeles de San Rafael donde murieron cerca de 60 personas. ‘Fue muy criticado en su momento’, pero como él mismo decía ‘el despacho del gobernador está donde está el gobernador’. Adolfo Suárez también fue Director de RTVE ‘donde hizo mucho por la imagen del rey’, donde estaba permanentemente involucrado en el cargo y tras la muerte de Franco, fue nombrado Ministro Secretario General. ‘Mi padre deseaba ser presidente del Gobierno y estaba convencido de que lo sería’ ya que ‘su ambición ha sido finalista’ explica Suárez Illana.
Nada más ser nombrado presidente, Adolfo Suárez se compromete a convocar comicios democráticos libres antes de un año y su plan ‘era llevar a España a las elecciones y que fueran otros los que, ganándolas, gobernaran’. En 1977, se crea la UCD y se legitima el Partido Comunista, con lo que ‘pasé de ser Adolfo en el colegio al hijo puta de Suárez’ de un día para otro. Reconoce que su padre ‘se la jugó legalizando el PCE, y enseguida Santiago Carrillo hizo lo mismo cambiando los estatutos del partido’. En esos comicios no hubo mayoría absoluta, ‘lo que dificultó las cosas y quizá hizo mucho más plural la Constitución’. Tiene claro que si tuviera que describir con una sola palabra las primeras elecciones democráticas sería ‘ilusionantes’.
Adolfo Suárez Illana se emociona al hablar de su madre Amparo, y cree que ‘hubiera sido imposible todo lo que hizo mi padre si no hubiera tenido a la mujer que tenía al lado’. Se sincera sobre su enfermedad, ya que ha sido operado en dos ocasiones de tumor de cuello. ‘Estoy muy bien’ aclara ‘pero las hemos pasado canutas’. Y recordando el cáncer de su madre y sus hermanas, admite que ‘las admiro porque fue mucho peor’. Además comparte su afición por la poesía, publicando un libro con poemas dedicados a sus padres. También practica la tauromaquia y ‘podría tomar la alternativa esta misma tarde, pero sería traicionar’ asegurando que ‘hay un respeto que le debo a los toreros’.
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En 2002 Adolfo Suárez Illana se afilió al PP y fue presentado como candidato a Castilla-La Mancha en un mitin al que su padre insistió en asistir. ‘Estaba feliz por el cariño recibido y nos hizo falta una hora y media para sacarlo de allí’ recuerda. Comenzó en la política ya que es ‘bueno que gente que no es profesional entre en ella, dé un tiempo de su vida y salga’. Y cree que los políticos ‘hemos dado una imagen pésima’. ‘No hay que poner la vista en la gestión sino en la política’ aclara ‘que es poner un futuro delante de la gente’.
La enfermedad volvió a caer sobre la familia Suárez Illana cuando en 2003 le dijeron que Adolfo Suárez estaba en un avanzado estado de Alzheimer’. ‘A mi padre le borró la base de datos, pero no la forma de ser’ y explica que se pasaba horas con él, incluso cuando ya no podía decir nada. En sus últimos días, necesitaron cómplices fuera de la familia que testificaran lo que le ocurría y las tres personas que le visitaron fueron ‘el rey, su confesor Antonio Cañizares, y su contrario Alfonso Guerra’.
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La amistad entre Adolfo Suárez y Don Juan Carlos ha sido muy profunda y ‘se han dicho de todo’, pero por encima de una discusión entre amigos ‘estaba su proyecto en común’. Cuando el rey le entregó el Toisón, Suárez le preguntó ‘¿Tú quien eres?’ a lo que le contestó ‘¿Quién voy a ser, idiota? Tu amigo, Juan Carlos’. Para recordar el momento quiso tomar una fotografía, ‘pero a mí me costaba retratar a mi padre como estaba’. Julio Iglesias le dio una idea y decidió fotografiar a los dos amigos de espaldas al objetivo. En ese momento Bertín Osborne recuerda el día que murió Adolfo Suárez y como ‘recibió el cariño de toda España’. A lo que su hijo contesta ‘mi padre tenía defectos enormes, pero es un hombre que hizo cosas grandes’.
Gracias a testimonios como el de Adolfo Suárez Illana y a los buenos datos de audiencia, RTVE ha dado el respaldo definitivo a su programa estrella con una merecida renovación por 18 nuevas entregas, que contarán con la presencia de personajes como Alaska y Mario Vaquerizo, El Cordobés, Arturo Fernández o Ana Obregón entre otros. Otra de las novedades de los nuevos programas es su duración, ya que durarán 10 o 15 minutos más, aumentando además su coste, que será de un 27% más que los de la temporada que acaba de finalizar.
