Las acusaciones por plagio en la industria musical están a la orden del día. Tanto que ni la novia de América se libra de ellas. Hablamos de Taylor Swift, que ha sido demandada por el músico Jesse Graham por, al parecer, copiarle su tema ‘Haters gonna hate’ en su Shake it Off. Así, frases como ‘Haters gonna hate, players gonna play’, aparecen, tal cual, en el tema del rapero. Según fuentes legales, esta acusación se quedará en agua de borrajas ya que el Copyright no protege frases cortas y además, para más INRI, no son originalmente suyas.
Y si de frases va la cosa, y dejando a un lado a Taylor Swift. Ariadna Grande parece que se ha metido, también, en un jardín. Su canción ‘The Way’ ha sido el blanco de la furia de la compañía Minder Music por el uso, según ellos ilegalmente, de una frase de la canción ‘Troglodyte’ del grupo The Jimmy Castor Bunch. El tema de la cantante estadounidense comienza con: ‘What we’re going to do is go back in time’ mientras que el tema del que supuestamente ha plagiado, de esta otra: ‘What we’re gonna do right here is go back, way back, back into time’. El problema aquí es que, al contrario de lo que le pasaba a Swift, esta frase se considera icónica por lo que según Minder Music necesita licencia para usarse. ¿Parecida? Juzgad vosotras mismas.
Culo veo, culo quiero
Pero las demandas por plagio no se centran únicamente en copiar la letra de una canción, y tanto Rihanna como Beyoncé lo saben bien. La cantante de Barbados fue demandada por el famoso fotógrafo David LaChapelle por el concepto artístico del videoclip S&M. Al parecer, ha copiado el concepto, robando ‘la composición, la sensación, el tono, la forma, el tema, los colores, las proporciones, las características, la decoración, el vestuario y la iluminación que se reconoce en el trabajo de LaChapelle’. Es decir, que Rihanna ha hecho un copy-paste en toda regla. ¡Será ladrona!
Beyoncé, por su parte, ha seguido la misma línea de “inspirarse” sospechosamente en el trabajo de los demás. En este caso, el plagio se centra en la labor de unos jóvenes canarios que consiguieron unas espectaculares imágenes andando o corriendo sobre el agua. Estas gustaron tanto a la cantante que envió a sus agentes, los que estuvieron en contacto con ellos hasta que… ¡desaparecieron! Poco tiempo después salió a la luz el videoclip de su nueva canción ‘Runnin’’ con unas imágenes, no parecidas… ¡iguales! La lección de hoy, por tanto, es: ¡Por favor, no plagiéis! Y si lo hacéis, sed un poco más inteligentes que tarde o temprano os van a pillar…