Las buenas sensaciones han regresado a 20 Minutos después de mucho tiempo. El diario gratuito ha vivido en los últimos meses un cambio de dueño, una reducción de su plantilla, una contención de su presupuesto y una renovación interna que comienza a dar sus frutos. Lejos de las ‘anquilosadas’ estrategias de su editor noruego original, el Grupo Schibsted, la cabecera comienza a coger aire y parece haberse adaptado con éxito a las nuevas directrices marcadas por profesionales muy pegados a la evolución digital con ideas frescas y una actitud más flexible.
En este sentido la adquisición del Grupo Heraldo ha venido acompañada de una mayor autonomía del diario, siempre dentro de unos gastos mucho más reducidos. Los profesionales que se han mantenido en la plantilla han tenido que redoblar desde julio su trabajo para intentar mantener el destacado posicionamiento de su portal, según certifica el medidor único digital comScore. La página web sigue siendo una de sus piezas clave y a pesar de todos los cambios vividos en los últimos meses sus resultados no se han resentido.
Pero los ingresos procedentes de la versión digital de 20 Minutos siguen siendo insuficientes. Sí servirían para mantener la web, pero ésta carecería de peso sin su versión en papel que aunque costosa es absolutamente necesaria. Así lo saben también desde el Grupo Heraldo que ha mantenido e incluso aumentado la difusión del diario impreso desde su llegada, según los datos de septiembre y octubre recogidos por la Oficina de Justificación de la Difusión (OJD). Este incremento es algo casi insólito dentro del sector de la prensa en los últimos años.
Con este panorama positivo algunos sólo ven un hándicap dentro de esta reconversión. Se trata del peso que aún mantiene su director histórico, Arsenio Escolar, dentro de 20 Minutos. No obstante, el papel de Escolar se ha ido reduciendo desde la entrada del Grupo Heraldo y como consecuencia del funcionamiento más dinámico y autónomo del diario. Dentro de la nueva estructura de la cabecera su papel es, por tanto, mucho menor que en el que tenía en épocas anteriores y su alejamiento del grueso de la plantilla es más que evidente.
Esta situación hace indicar que la posible salida de Arsenio Escolar como director de 20 Minutos podría encontrarse cada vez más cerca. El principal escollo para su marcha es el ‘blindaje’ de Escolar por ser uno de los fundadores del diario hace ya quince años y conservar un salario que ronda los 300.000 euros anuales. Despedirle supondría un importante montante económico, justo en estos momentos en los 20 Minutos comienza a ver la luz al final del túnel. Las informaciones que se manejan en el sector apuntan a que las negociaciones del Grupo Heraldo y Arsenio Escolar para una despedida pactada volverían a estar sobre la mesa tras haberse roto semanas atrás. Muchos van más allá y aseguran que podrían llegar a buen puerto en fechas muy próximas.
Seguiremos Informando…
