Novartis ha presentado en la Reunión Anual del American College of Rheumatology (ACR) celebrada en San Francisco, Estados Unidos, nuevos datos sobre Cosentyx® (secukinumab) que demuestran que es capaz de reducir la progresión del daño estructural de la columna en espondilitis anquilosante y del daño articular en artritis psoriásica.
Se trata de los nuevos datos de los estudios MEASURE 1 en espondilitis anquilosante y FUTURE 1 en artritis psoriásica, dos tipos de espondiloartritis (EspA) que, “afectan a entre el 0.1% y el 2.5% de la población general y cuya incidencia anual estimada es de 7,2 casos por cada 100. 000 habitantes para AP y 3,6 casos por cada 100.000 habitantes para EA”, subraya el reumatólogo de la Unidad de Artritis del Servicio de Reumatología del Hospital Clínic (Barcelona), el Dr. Julio Ramírez.
En espondilitis anquilosante los resultados de la ampliación del estudio clínico MEASURE 1 demuestran que hasta el 80% de los pacientes con la enfermedad no sufrieron progresión radiológica de la columna vertebral en un examen con rayos X. Además, Cosentyx® mostró una respuesta sostenida en la mejora de signos y síntomas, función física y calidad de vida en pacientes con espondilitis anquilosante durante dos años.
En artritis psoriásica los nuevos datos procedentes del estudio FUTURE 1 demuestran la ausencia de progresión del daño articular en el 84% de los pacientes y el mantenimiento de la respuesta al tratamiento en afectación de articulaciones y piel, función física y calidad de vida tras más de dos años de tratamiento con Cosentyx®.
Estos resultados son importantes porque se necesitan urgentemente nuevos medicamentos con nuevos mecanismos de acción, ya que muchos pacientes no alcanzan una respuesta adecuada con los tratamientos actuales, tal y como destaca el jefe de Sección del Servicio de Reumatología del Hospital Universitari de Bellvitge, el Dr. Xavier Juanola: “los antiinflamatorios no esteroideos (AINE) y la rehabilitación son los dos pilares fundamentales del tratamiento en este momento, aunque alrededor de un 60-70% de los pacientes tienen que pasar a fármacos modificadores de enfermedad (FAME) los cuales se usan principalmente en AP. Entre un 25-30% de pacientes no responden a AINE ni FAME y comienzan con tratamiento biológico. Este va muy bien pero sigue habiendo un porcentaje del 30% que no responde desde el inicio y otros pacientes que dejan de responder al tratamiento al cabo de un tiempo. Por ello, aunque el objetivo terapéutico ideal sería una remisión total, lo que intentamos es que la enfermedad tenga una actividad mínima que permita al paciente llevar una vida prácticamente normal”.
Además de lo anterior, según el Dr. Ramírez, “las enfermedades reumáticas en su conjunto suponen la primera causa de discapacidad física (de origen no mental) en el mundo occidental. Concretamente, la espondilitis anquilosante y la artritis psoriásica son, tras la artritis reumatoide, las enfermedades reumáticas inflamatorias crónicas más frecuentes en la población general. Suponen una parte importante de los enfermos que se siguen de manera crónica en las consultas de reumatología, teniendo un importante impacto a nivel personal, social y laboral, y conllevan un consumo alto de recursos sanitarios”.