Leopoldo López Gil ha protagonizado una nueva entrega de los Encuentros en la Tercera Fase, el espacio de entrevistas del editor del Grupo prnoticias.com Pedro Aparicio. En esta entrega –la primera de dos partes- el padre de Leopoldo López, el opositor venezolano encarcelado por el chavismo, explica a Pedro Aparicio cómo se gestó su expulsión de Venezuela, el encarcelamiento de su hijo y nos cuenta las claves del nuevo proceso que se abre en el país suramericano tras el triunfo de la oposición en las últimas elecciones legislativas.
Su exilio
Leopoldo López Gil lleva un tiempo en España pero no por motivos profesionales ni familiares, al contrario fue expulsado por el Gobierno venezolano. “Tuve que salir de mi país que es Venezuela donde resido y trabajo por razones netamente políticas y por una falta de libertad de expresión. He sido castigado y perseguido por el régimen actual de Nicolás Maduro”.
Los comienzos de su hijo Leopoldo
“Leopoldo fue un alcalde muy exitoso hasta el punto de que fue electo con un 56% de los votos y al producirse la reelección ganó con el 82% de los votos. En 2008 intentó postular a la alcaldía metropolitana de Caracas con varios sondeos de opinión que le daban un mínimo del 70% de intención de voto, pero el Régimen le inhabilitó políticamente. Él llevó este caso a la Corte Interamericana de los Derechos Humanos, que posteriormente ordenó al Gobierno restituirle todos sus derechos políticos, cosa que el Gobierno no hizo”.
El encarcelamiento de Leopoldo
“En 2014 acompañó a los estudiantes a la celebración del Día Nacional de la Juventud para protestar en contra de unas detenciones injustas a cuatro estudiantes. A partir de ahí se convirtió en una piedra de zapato para el Gobierno. Luego de que él se retiró y mandó a retirar a los manifestantes un agente de la Policía, que además era un guardaespaldas del Ministro del Interior, le disparó a la manifestación y asesinó a dos personas: uno era un personaje pro-gobierno y otro fue un joven que vio como se había asesinado y al que le dispararon inmediatamente de descubrirlo”.
“Leopoldo estaba en su oficina y dos horas después de sucedido el asesinato, el presidente de la Asamblea Nacional Diosdado Cabello ya estaba en televisión culpándole de estos asesinados. Esa misma noche dieron una orden de captura a la Policía y Leopoldo se entregó seis días después, el 18 de febrero de 2014 y desde entonces está preso”.
Juicio manipulado
“Uno de los dos fiscales que le acusó luego se fue de Venezuela y estando en Estados Unidos declaró que todo el caso de Leopoldo fue un montaje y que la sentencia fue una farsa. Una sentencia de casi 14 años que no está basada en nada. Para ilustrar eso podemos decir que durante el tiempo del juicio -que duró casi un año y medio- nunca se permitió a la defensa proporcionar ningún testigo ni promover peritos ni expertos para analizar las pruebas. La defensa estuvo absolutamente ausente del juicio y eso en cualquier parte del mundo haría que este proceso fuese nulo”.
El futuro tras las elecciones legislativas
“Si el Gobierno tuviese algún sentido común y como demostración de concordia debería poner en marcha la liberación total y absoluta de todos los presos políticos. De hecho, ya no tendrían que estar presos porque no son enemigos ni adversarios. Hemos ganado con el 75% de los votos la Asamblea, lo suficiente para hacer cualquier tipo de cambio en las leyes, promover destitución de funcionarios o llamar a un referéndum revocatorio presidencial. Hay muchísimas cosas que se pueden hacer, pero también es verdad que este Gobierno puede quedarse legítimamente hasta el año 2019 si no hay un revocatorio”.
“Si ellos (El Gobierno) quieren continuar y mejorar tendrían que buscar un entendimiento con el pueblo venezolano, a través de su Congreso y su Asamblea”.
¿Qué hará el Gobierno de Nicolás Maduro?
“Yo me imagino que si el Gobierno no escucha y se hace el sordo hasta el extremo de que la gente se desespere vendrá un movimiento en que la misma población libere a los presos. Yo me imagino que esto no es deseable, porque a la larga este tipo de manifestaciones pueden traer consecuencias difíciles. Quisiéramos que todo este proceso de cambio en Venezuela hacia un nuevo rumbo se pueda llevar democrática y civilizadamente. La única llave que puede abrir esa puerta la tiene el Gobierno y no se puede comportar de manera autocrática tras ver en las urnas que la gente le está rechazando. Si esto hubiese sido una votación plebiscitaria el Gobierno estaría fuera, por lo tanto es claro que mucho más de la mitad de Venezuela no está dispuesta a seguir con este Régimen”.
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