Es necesario recuperar la relación comercial bilateral entre Argentina y Brasil para rediseñar y reconfigurar el “desgastado” Mercosur (Mercado Común del Sur). Así se pone de manifiesto en un informe elaborado por Marco Antonio Sabino, socio y director general de Llorente & Cuenca Brasil y Pablo Abiad, socio y director general de la misma agencia pero en Argentina.
Argentina y Brasil están inmersos en un mar de cambios, que hacen de éste el momento propicio para renovar Mercosur. En el contexto político, según Abiad, Argentina tiene “el Gobierno de [Mauricio] Macri con muy pocos días asumido y con dos o tres medidas de alto impacto, incluyendo la devaluación de la moneda en un 40%, que buscan asentarlo en el poder”. En el centro de la estrategia de Macri se encuentra la relación con Brasil, lo que incluye su sistema político y empresarial, según el informe. “En el caso de Brasil”, continúa Abiad, “hay un juicio político que podría derivar incluso en la propia destitución de la presidenta Dilma [Rousseff]”.
El socio y director general de Llorente & Cuenca en Argentina añade que “el saldo de la balanza comercial hoy es favorable a Brasil en más de 15.000 millones de dólares, pero en ambos países son conscientes de que una alianza más potente, una revitalización general del Mercosur podría ser una palanca generadora de desarrollo y de buenas inversiones en los próximos meses, tanto en Argentina como en Brasil”.
Para las golpeadas empresas brasileñas de infraestructura, Argentina puede convertirse en una gran oportunidad si Macri cumple su entusiasta promesa de modernización. Las propuestas pueden incluso apuntar a reconvertir al Mercosur para dar flexibilidad a sus miembros para negociar acuerdos comerciales con terceros países o bloques, lo que hoy está prohibido por las normas de la unión aduanera.
Miembros del equipo de política externa de Macri están convencidos de que se pueden implementar desde el Mercosur esfuerzos inmediatos para que América del Sur sea un área de libre comercio. También de que Brasil y Argentina podrían trabajar juntos sobre cómo ayudar a Venezuela a una transición democrática.
La determinación de Macri en la apertura de la economía, la reducción de la interveción del Estado, la restauración de la credibilidad de las estadísticas públicas, la liberalización del comercio y la negociación con acreedores externos, prepara el camino para que Argentina se reinserte en la economía mundial y al mismo tiempo cree un ciclo virtuoso para poner en marcha la recuperación de la economía de Brasil, su gran socio regional.
La agencia Llorente & Cuenca lleva fomentando la relación entre ambos países varios años. Así, creó en Brasil el Argentinian Desk y en Buenos Aires el Brazilian Desk. Ambos ofrecen servicios de consultoría y asesoramiento para empresarios y hombres de negocio, según explica Marco Antonio Sabino.
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