La línea Violeta by Mango, salió a la luz hace dos años para vestir a aquellas mujeres que tenían una talla más allá de la 40. Supieron ver el problema actual del tallaje que se resumen en que el resto de las demás cadenas solo fabricaban hasta la talla 42 (o 44) como mucho y dependiendo siempre del tipo de pantalón. De hecho, te será imposible encontrar un pantalón de esta última, por ejemplo, en Zara. Así… ¿Cuál fue la polémica que levantó esta iniciativa? La consideración de la 40 como “talla grande”, sabiendo además que el Ministerio de Sanidad situó esta categoría en la 48. Con todo ello, la denominación “marca para tallas grandes” no sería del todo real ya que, hasta ahora, solo fabricaban hasta la 52. Pero esto ha cambiado, tras muchas quejas, ya que la línea de Mango ha ampliado esta producción hasta la 54. Aun así, la oferta real para aquellas mujeres que utilizan tallas grandes, se limitaría a cuatro.
Pero su fundadora, y sobrina del fundador de Mango, Violeta Andic, defendió su proyecto alegando que en ningún momento se autoproclamaron marca para tallas grandes, sino que se dedican a crear ropa para las mujeres con curvas. La idea de ofertar tallas que otras marcas no fabrican es perfecta. De hecho, nadie critica el proyecto en sí. El problema vino con la manera de afrontarlo. Mango ha querido diferenciar a las mujeres (mal hecho) en dos grupos: aquellas que usan tallas menores de la 40, y las que la usan a partir de esta. ¿Cuál es el problema? Que con este planteamiento se deja entrever que si usas una talla 40, ya no entras en la categoría de delgada. Hecho totalmente falso.
El tallaje actual es una de las cosas más imposibles a las que una mujer tiene que hacer frente cuando va de compras. Lo que en una tienda es la 38, en otra es la 40. Y viceversa. Por lo tanto, crearte la idea de tu talla basándote en lo que Amancio Ortega opine, no es válido. ¡Chicas! Olvídaos de las tallas y compraos lo que os dé la gana.
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