Ahora que tenemos acceso al nivel de golfería que ha habido en Telemadrid. Ahora que somos conscientes de que nuestros compañeros se convierten en productores o productoras, dependiendo de la altura de la mesa… Ahora que se me llena la cara de rojez de sonrojez y de vergüenza, me veo libre para decir una vez más: ¡Uffff! de la que me ha librado no querer saber ni intervenir. ¡Ah!, y de la productora de Ana Rosa Quintana, nada de nada… ¿Miedo? Silencio que ha pasado la Navidad y los fastos ya los hemos celebrado con la Espe.
Qué asco, qué pena, qué mierda de políticos y de periodistas politizados, empresarios que pagan mal y lo hacen peor. Porque pagar a Hermmannn por hacer el telediario que hacía, en el que le temblaba hasta los tirantes tiroleses. Y se lo ha llevado muerto… Por no hablar de los impresentables programas de Cristina Tárrega, que cobraba una BESTIALIDAD por un programa ‘cultural’ en el que hablaba con Rodríguez Sieiro de si es interesante entrar vestido o desnudo en casa de tus suegros, y temas, como éste, de gran importancia y relevancia… O el iluminado de Sánchez Dragó y su puto gato, que no tendrá la culpa de nada, pero era como de coña. Programas subidos de precio, la New Atlantis de Buruaga que está en todos los guisos murcianos… Sólo una pregunta: Los 800 que han salido de Telemadrid al paro, saben quiénes son los que tienen su dinero… ¿Y se lo pedirán? ¡Ah!, Y la querella contra el Gran Wyoming, que también la pagamos todos… Melchor, el gran Melchor, abogado, periodista, editor, productor, amigo de los amigos de sus amigos… vaya lío.
Si tuvieran vergüenza no saldrían de sus casas… Hablamos de MILLONES DE EUROS, entregados a los amiguetes, y ganados por cuatro que dicen ser periodistas.
Recuerdo la etapa de Manolito Soriano, fue el principio de una gran mentira que llevó al desmantelamiento y ruina personal y profesional de muchos ilusionados con el proyecto. La ambición de unos se carga el todo… Pero, como a los políticos que adoran u odian, hay que hacerles que devuelvan lo que no es suyo. Una cosa es el beneficio industrial, y otro muy distinto es multiplicar por ‘n’ la cifra, el que firma… Como es dinero público, no es de nadie.
La gran putada es que de TV3 no podemos hablar porque nada se sabe, está todo bajo el peluquín del Honorable.
A volar con IBERIA…