Tras un descanso para comer sigue la jornada del Santander Social Weekend. Empezamos con la marca personal y su gestión a través de Tiscar Lara, directora de comunicación de EOI.
Si analizamos tendencias, lo que está claro es que lo personal vende, y vende mucho. Lo vemos como poco manipulado y más creíble. Una reseña u opinión de una persona nos lo creemos más que un catálogo comercial. Y eso las marcas lo saben y lo usan. Las personas se convierten en producto. Un ejemplo clarísimo: Los youtubers. Lo profesional se disfraza de personal y se convierte en una exitosa estrategia de marca.Lo personal está de moda, recalca la experta.
Transcurre la charla y no sé si son las horas o Tiscar no engancha con su propia marca personal. No son horas para remembers y los datos que nos ofrece no están demasiado actualizados. El discurso sería apropiado para una charla sobre la historia de la reputación de la marca personal pero echo de menos futuro y frescura. Y no soy la única.
Un cafe doble, por favor #SantanderSW
— Naiara Lertxundi (@nlertxundi) febrero 20, 2016
Con todos mis respetos… Una persona que no maneja la oratoria no puede venir a hablarme de Marca Personal. #SantanderSW
— Javi GeDe (@JaviGeDe) febrero 20, 2016
La jornada continua con Tristán Elosegui. La cosa se anima a base experiencia profesional y de verdades olvidadas en torno a las redes sociales.Mas que teoría hemos visto practica y experiencia profesional y se agradece. Enumera los errores de las empresas en las redes y recalca la confusión entre estrategia en redes sociales y estrategia de marketing. No toda la estrategia hay que basarla en las redes. Cuidado. Si un cliente quiere vender y que sea a corto plazo,se equivoca recurriendo a las redes sociales. Hay otros canales más directos.
Curioso el recordatorio del olvido del adjetivo: las redes sociales son eso : SOCIALES , son un canal de comunicación entre personas y no entre empresas y personas. Lo obvio a veces se olvida.Tristán pone el ejemplo de una clínica dental que genera mucho engagement publicando paisajes bonitos en Facebook. Muy bien,pero ¿De qué le sirve a su negocio? Extiéndase esto a gatos, monos, bebés y demás recursos que las empresas están usando hasta la saciedad nadie sabe para qué.
¿Cómo se arregla esto? Creatividad, adwords, conocimiento exhaustivo del target,…. Los oyentes sugieren distintas soluciones. Tristán sugiere la más obvia: Usar cada cosa para lo que sirve. Así de sencillo: usar las redes sociales para lo que sirven. Y no sirven para todo. Utilizarlas para lo que mejor hacen, no para que hagan lo que nosotros queremos.
Tristán Elosegui Termina su intervención en el Santander Social Weekend estableciendo los tres pilares para que las redes sociales funcionen:
- Buscar el engagement real como base. Recalca “real”. No sirven los sucedáneos si no la interacción efectiva.
- Correcta medición. Es un clásico pero cada acción hay que medirla.Este punto siempre lo recalca Elosegui y se agradece en todas sus intervenciones.
- Vídeo más mobile: es el futuro y las marcas lo saben.
Cierra las intervenciones de la jornada Raquel Sastre. ¿Existen los límites en el humor? Empiezo a preguntarme qué sentido tiene este tema en un evento Social Media. Avanza la exposición y entre risa y risa la humorista nos da la clave: Cualquiera puede hacer chistes y también en las redes sociales. Saca el ejemplo de Zapata y la reacción de Irene Villa.
La finalidad básica del humor es el entretenimiento y las redes sociales también pueden recurrir al humor para dirigirse a sus seguidores. Eso sí, depende de la marca. Pone el ejemplo de Alcampo o Media Markt como ejemplo del uso del humor en las redes con acierto pero no aconseja su uso en todas las empresas. Termina su intervención con broche de oro: “A fin de cuentas, todo es un chiste” (Charles Chaplin). Mañana más.
Seguiremos Infromando…
