El País revolucionaba hace dos semanas el sector anunciando el fin del papel y una reconversión digital a marchas forzadas. Una nueva filosofía de su director Antonio Caño que opacó dos cambios fundamentales: el primero fue el nombramiento de un nuevo equipo directivo y el segundo es una reforma que dará paso a una nueva redacción. Las informaciones llegadas hasta prnoticas no obstante indican que estas obras se están centrando en la planta noble de los despachos y que en la verdadera redacción solo se están haciendo cambios estéticos.
El País se transforma para seguir siendo líder. Es la máxima del diario en su 40 aniversario. Una efeméride que se está celebrando en diferentes ámbitos y que según su director Antonio Caño marca un punto de inflexión en la filosofía del diario, ahora 100% digital y elaborando una edición impresa “hasta que sea posible”. En esta lógica además se realizó una importante reestructuración del equipo directivo para “apoyar” o ¿sustituir? a Caño en el futuro.
Como ya os habíamos confirmado se produjo el nombramiento de nuevos directores adjuntos: Jorge Rivera, responsable de Información; José Manuel Calvo, que se ocupará del área de Coordinación Editorial, y David Alandete, al frente de Producción y Distribución de contenidos. Lluís Bassets continuará como director adjunto en la edición de Cataluña. Hasta el momento los directores adjuntos eran Alandete y Bassets.
Luis Prados ha sido designado director de El País América y estará al frente de las ediciones del continente americano desde México. Carlos de Vega será el nuevo subdirector de Vídeo y Fotografía. Bernardo Marín, Miguel Jiménez, Eva Saiz y Maite Rico continuarán como subdirectores responsables de Canales Digitales, Información, Edición impresa y Fin de semana, respectivamente.
En lo que respecta a la reforma de la redacción, las obras se han vendido como una gran innovación, con importante material gráfico e incluso con un microsite para explicar a los trabajadores la nueva disposición de los puestos en la segunda planta. La realidad indica no obstante, que efectivamente estamos ante un cambio de disposición de los periodistas en El País, pero no ante una nueva redacción. Todo girará ahora en torno a una isla central donde treinta redactores y un equipo multidisciplinar redactará y decidirá los soportes, ajustará los contenidos web al papel y “optimizará” los textos para Internet. Pero poco más.
Y es que quienes han visto además las obras indican que este cambio de sillas es el único cambio que se hará en esta nueva redaccion de El País: todo se complementará con un movimiento de sillas, reutilización de las mesas y un cambio de moqueta para dar un lavado de cara a la vieja redacción. Donde sí que se notarán las obras, nos han comentado, es en la planta noble -la de los despachos de los jefes- donde efectivamente se están habilitando nuevas comodidades y mejorado los despachos para que los directivos del diario realicen su verdadera revolución digital.
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