La semana pasada comenzamos con la pautas para gozar de una buena lactancia, de la que destacamos, sobre todo, el contar con una ambiente tranquilo para llevarla a cabo. Hoy, y de nuevo junto a nuestra experta de cabecera, la Madre Molona, abrimos el segundo capítulo de la serie para adentrarnos en la acción de forma más directa. Y lo hacemos con un par de soluciones, con las que podemos eliminar el dolor que puede llegar a producir el dar de mamar a nuestro pequeño, o pequeña, si lo hacemos mal: “Lo mejor para que los pechos estén bien es dejarlos al aire tras las tomas y que use tu propia leche como pomada”.
Otro factor que también influye es la postura. De hecho: “Es determinante”. ¿La mejor forma de llegar a buen puerto con la toma?: “El bebé no debe tener que girar la cabeza para engancharse. Por ello, su tripa tiene que estar pegada a ti completamente. Su cabeza ha de estar frente al pecho. Además, es importante que agarre aureola y no pezón (vas a ver las estrellas si se da el segundo caso)”. ¿Y si pasa?: “El mejor truco es que metas el dedo meñique es su boca y lo sustituyas por el pezón. Lo de tirar olvídalo”.
Además, algo en lo que las primerizas no caen es que este acto da mucha sed: “No es que os recomiende beber… ¡Es que os vais a morir de ella! El cuerpo te lo pide porque es lo que necesitas para fabricar la leche”. ¿Ocurre lo mismo con la comida?: “No. Mucho cuidado con esto. Intenta evitar la comida basura y trata de nutrirte bien, ya que vais a necesitar estar bien alimentadas. Cada 3 horas y variadita, la alimentación”. Así, y con esto, nos despedimos esta semana. ¿Quieres saber más? La semana que viene traeremos nuevos consejos.
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