Un actor en decadencia que viajaba a Japón para protagonizar un anuncio de un whisky. Esa era la trama principal de Lost in Traslation, la película de Sofía Coppola que nos acercaba a una práctica muy habitual de las grandes estrellas en sus últimos años en el mundo del espectáculo. Hasta ahora. Y es que cada vez es más común que los artistas más conocidos presten su imagen a una marca de colonia, ropa o algún gadget tecnológico. Una relación simbiótica que es capaz de hacer que el consumidor recuerde el producto que vendía su artista favorito, especialmente si aparece realizando actividades poco comunes y mostrando su cara más divertida, como es el caso de estas tres publicidades.
Un tigre nunca deja solo a otro tigre
La pasión por el fútbol es capaz de cruzar fronteras. Y si no que se lo digan al actor estadounidense Rob Schneider que interpreta un anuncio del equipo mexicano de fútbol Tigres, con motivo de su pase a los cuartos de final de la Liga MX. El intérprete, conocido por comedias como Deuce Gigolo o por ser un secundario habitual en las películas de Adam Sandler, está muy vinculado al país azteca, ya que está casado con la mexicana Patricia Azarcoya Arce por lo que ha querido mostrar su apoyo a los jugadores, vistiendo la camiseta de la Universidad Autónoma de Nuevo León y gritando el lema: un tigre nunca deja solo a otro tigre.
No eres tú mismo cuando estás hambriento
El actor Willen Dafoe fue el protagonista del anuncio de Snickers para la Super Bowl. En esta ocasión, el actor se pone en la piel de la sex symbol Marilyn Monroe durante la grabación de su famosa escena en el filme La tentación vive arriba. Enfundado en el mítico vestido blanco que llevaba la actriz, Dafoe se queja de que el rodaje es un desastre, hasta que un miembro del equipo le sugiere que “se pone un poco insoportable cuando tiene hambre” al tiempo que le ofrece una de las conocidas barritas de chocolate, y se transforma en la verdadera Monroe.
First Date / Ryanville
Kevin Hart fue el artista elegido para mostrar su lado familiar en el anuncio de Hyundai emitido durante la Super Bowl. El cómico se convertía en el típico suegro celoso cuando su hija sale por primera vez con un chico. Por lo que decide prestarle a su “yerno” su propio coche, utilizando el GPS del vehículo para seguir a la pareja. Así, vemos al actor en el cine, en el parque de atracciones o montado en un helicóptero, desde donde vigila todo lo que hacen los jóvenes e intimidando al novio de su niña. La marca de automóviles también contó con Ryan Reynolds en otro de sus spots del mítico partido de fútbol americano, donde mostraba una ciudad en la que todo el mundo es un doble del actor, desde unos obreros, un policía y hasta un ciclista.
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