Linkedin, como bien informamos hace dos días, sufrió el que, hasta la fecha, es el ciberataque más violento, y con peores consecuencias, de la historia. En él se sustrajeron la friolera de 167 millones de contraseñas, de las cuáles están en subasta 117 millones (los que se robaron con correo electrónico incluido). Un acto que dejó preocupados a muchos usuarios alrededor del mundo y ante el que la plataforma ha querido responder con contundencia. Y lo ha hecho anulando 100 millones de claves (una a una).
Un hecho que podría haber llegado tarde ya tanto el robo como la posterior comercialización del material ya se habían producido. Con todo, Linkedin tiene pensado contactar con todos y cada uno de los afectados para comunicarles su medida, a los que ofrecerá medidas preventivas, como la verificación en dos pasos. También se les instruirá sobre cómo generar una clave realmente segura aunque, hay que saber que, con los programas de los hackers, podrían ser sustraídas de nuevo sin problema. Por último, y de cara al futuro, está pensando en presentar acciones legales contra aquellos foros, y lugares web, en los que se hayan situado, de una forma u otra, de este intercambio de contraseñas.
Linkedin, presa de un dejavú
Hablamos de la respuesta de Linkedin ante un ataque que pudo haberse evitado ya que no era nuevo. En 2012, sufrieron uno similar, realizado por la misma persona, de nombre Peace, la cual accedió a los datos por el mismo lugar. En ese caso, sólo se llevó 6 millones de contraseñas en este ha querido ser más incisivo. Esto no deja en muy buen lugar a la red laboral y lleva a los usuarios a realizar uan pregunta muy sencilla… ¿Por qué ahora todo será distinto?
Seguiremos Informando…