Honduras ha perdido cinco puestos en la clasificación mundial de Libertad de Prensa que realiza cada año Reporteros sin Fronteras. Una muestra del hostigamiento gubernamental al que se deben enfrentar los periodistas del país, especialmente los más críticos con la política oficial, que son amenazados y a los que se les suele impedir el ejercicio de su profesión en actos de interés general. El último ejemplo del control mediático ha sido la suspensión de las emisiones de Globo TV Honduras ordenada por la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) por no renovar su permiso de operaciones, junto a otras veinte compañías.
Sin embargo de los 21 canales sancionados, sólo Globo TV ha visto interrumpida su señal. “La situación es delicada porque este es un atentado a la libertad de expresión, al derecho que tenemos de informar, a que el pueblo este informado y a la democracia” ha expresado David Romero, director del canal de televisión hondureño. “Se trata de una represalia por parte del gobierno” por sus reiteradas críticas a la administración de Juan Orlando Hernández. La emisora se encuentra en el punto de mira de las autoridades desde el golpe de Estado que se produjo en 2009, ya que es uno de los medios de comunicación independientes más escuchados del país.
Doris Madrid, comisionada de Conatel ha explicado a BBC Mundo que “Tenían la obligación de renovar los permisos dos meses antes de su vencimiento, por lo que únicamente le dimos cumplimiento a la ley”, argumentando que la empresa no renovó su permiso vencido el pasado febrero. Lo que no ha hecho más que avivar la indignación de gran parte de la población así como distintas asociaciones sociales, que se han manifestado frente a la sede la Conatel para denunciar el abuso de autoridad y la violación al derecho de la libertad de expresión de Globo TV. Juan Barahona, coordinador del Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP), ha denunciado que el cierre del canal “es una represalia del gobierno por denunciar los casos de corrupción”.
Se refiere a las informaciones publicadas por David Romero acerca de un escándalo de malversación de fondos en el que podría estar implicado el presidente de Honduras. El periodista de Globo TV denunció en 2005 que tanto él como sus colaboradores habían recibido amenazas de muerte. Fue a raíz de anunciar en un programa en directo que tenía en su poder un video de Juan Orlando Hernández, cuando era presidente del Congreso, con representantes de treinta empresas creadas para desviar fondos del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS).
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