El proyecto de Fundación SEUR, Tapones para una nueva vida, ha posibilitado que 2 niños de Zaragoza tengan tratamiento gracias a una recaudación de 139.472 euros. La última beneficiaria es Vera Martín, que ha recibido 4.472 euros, además de la colección infantil Garabato, que le ha entregado la editorial Signo editores. Con esta aportación económica, que equivale a 22,36 toneladas de tapones, Vera Martín podrá tener un andador Walker, un aparato que permite que el niño se mantenga erguido.
Junto con la aportación económica, Vera ha recibido la colección infantil Garabato, de Signo editores. “Además de colaborar en la recogida de tapones, queremos que nuestras colecciones infantiles, que están teniendo tan buena aceptación entre los más pequeños, estén en las casas de todos estos niños, para ayudarles en el aprendizaje a través del juego, con un contenido diseñado siguiendo las pautas psicopedagógicas de cada etapa de desarrollo”, detalla Clara Alonso, directora general de Signo editores.
Desde su puesta en marcha en 2011, este programa ha conseguido ayudar a 119 menores, para los que se han recogido 3.891 toneladas de tapones por un valor de 874.853 euros. Además, con el reciclaje de este plástico se ha evitado la emisión de 5.836 toneladas de CO2, principal gas causante del cambio climático. Solo en el primer semestre del año, 12 han sido los niños que han podido tener tratamientos específicos o adquirir complementos ortopédicos que no están cubiertos por la Seguridad Social mediante el reciclaje de tapones.
Desde 2015, Signo editores se ha sumado a la iniciativa entregando colecciones de libros infantiles a todos los niños que reciben la ayuda de Fundación SEUR a través de este proyecto. Se trata de dos obras, Garabato y Trazo, dirigidas a menores de entre 3 y 14 años, que inculcan el placer por los libros a través de aventuras noveladas combinadas con material educativo. Cada una de estas obras contiene 12 tomos, con contenido bilingüe diseñado por un equipo de expertos en la infancia, entre los que se encuentran psicopedagogos y profesores nativos en inglés.
