En España, cuando hablamos de tecnología, solemos mencionar a Japón, a China o a Estados Unidos. No nos gusta mirarnos al ombligo, en algunos casos por no ser vanidosos y en la mayoría por desconocimiento. Y es que, no somos conscientes de que nuestro país, dentro de unas limitaciones lógicas, cuenta con un amplio abanico de invenciones, a nivel tecnológico. Sobre todo, en su aplicación en el sector sanitario.
Por poneros un primer ejemplo “tecnológico”. En el pasado MWC (o Mobile World Congress) el conocido Instituto Catalán de Nanociencia y Nanotecnología puso sobre la mesa unos sensores de grafeno, que se deben implantar en el cerebro, cuyo primer objetivo es detectar, con mayor premura, la epilepsia en los afectados. También, y aquí tiramos de actualidad, Marsi Bionics, junto a los hospitales Ramón y Cajal y San Juan de Dios, ha fabricado un exoesqueleto, de titanio y aluminio, con el que poder paliar la atrofia muscular espinal de niños entre 3 y 14 años. Dos avances de alto nivel que, de no conocer su procedencia, pensaríamos que han nacido en territorio americano.
Pero estos dos no son los únicos que reflejan en el buen estado del sector “salud”, en este ámbito. Por ejemplo, En España se ha dado vida el primer Robot Quirúrgico con visión tridimensional. Ese que, gracias a que cuenta con tres brazos adaptables a las necesidades del cirujano, puede ayudarle en las operaciones o, incluso, hacerlas él solito. Por otro lado, somos los autores del primer implante de costillas impresas en 3D. También somos culpables de la tecnología Crispr, capaz de corregís mutaciones y trastorno genéticos (entre otras muchas cosas). Vamos, que somos unos hachas. Y no sólo en este sector… ¡Atentos!
De los Pantalones Tecnológicos a La Sonda Rosetta
Tras nadar por el sector sanitario (porque España no es de innovar en un solo ámbito), nos adentramos en otros en los que nuestro país también ha dado el ‘do de pecho’. Por ejemplo, desde Panda Security dieron vida, hace ya un tiempo, al primer antivirus específico para la famosa nube. También, y aunque pueda parecer algo más banal, somos los artífices del primer pantalón tecnológico. Los realizó la empresa Jeanología y, hasta ahora, nadie le ha hecho sombra. Y para terminar, no podemos dejar de mencionar nuestra aportación a La Sonda Rosetta, realizada por SENER. La tecnológica formó parte de la creación de la plataforma de la sonda, así como del dispositivo de carga útil. Además, varias entidades científicas españolas, como la IAA, el CSIC, el INTA y la UPEM participaron en su aterrizaje.
Primeras piedras… de un largo camino por recorrer
En resumen. España es un país innovador, tecnológicamente hablando. Es cierto que aún le queda para estar en lo más alto pero tampoco tiene que arrugarse antes sus rivales. Los ejemplos que hemos puesto lo avalan.
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