Antonio Fernández-Galiano, presidente Ejecutivo de Unidad Editorial, prácticamente no ha tenido vacaciones. La confirmación a mediados de julio de que Urbano Cairo finalmente se hacía con el control de RCS, matriz del editor de El Mundo, trastocó todos sus planes y la aparente tranquilidad alcanzada tras cerrar el tercer ERE en la compañía desde que comenzara la crisis, se vio truncada con las noticias que llegaban desde Italia y que en la mayoría de las ocasiones le situaban fuera de la compañía.
Desde prnoticias os hemos ido contando el desarrollo de los acontecimientos y todo apunta a que Urbano Cairo quiere dar un golpe de timón en España donde considera que el desempeño de la compañía no ha sido bueno. No obstante, y como también hemos señalado en nuestras informaciones el nuevo presidente y consejero delegado de la compañía quiere conocer a fondo la problemática que se vive en España para tomar una decisión.
Y para ello ya ha sostenido los primeros contactos con Fernández-Galiano, que ha viajado a Italia para entrevistarse con el nuevo número uno de RCS. Según hemos podido saber la reunión ha sido breve y sin entrar en demasiados detalles. Quienes han estado en el encuentro hablan de una primera toma de contacto en la que no se ha decidido nada. En cualquier caso, el equipo de Galiano ha sido invitado a próximas reuniones y se está intentando cerrar una visita de Urbano Cairo a Madrid para conocer de primera mano que está pasando.
Luego de todo este procedimiento, probablemente a finales de septiembre, Urbano Cairo nombraría al nuevo presidente ejecutivo en España, lo que significaría la salida de Galiano. No obstante, hasta que estos plazos se cumplan y se haga el anuncio oficial Fernández Galiano considera que tiene una posibilidad de encarrilar la situación y para ello se encuentra buscando apoyos en todas las esferas de poder en España y en Italia.
Galiano toca la puerta de Moncloa
En esta línea Galiano ha tocado discretamente la puerta de Moncloa. Fernández Galiano cultiva una buena relación con el Partido Popular y con círculos monclovitas. Las relaciones quedaron en muy buen pie desde que el Presidente Ejecutivo de Unidad Editorial forzara la salida de Pedro J. Ramírez, que por esas fechas –en 2014- se había vuelto sumamente incómodo para Mariano Rajoy y su equipo. Después del “Luis sé fuerte” y la serie de revelaciones por la financiación irregular del PP, el equipo de Rajoy acordó con Galiano la salida del periodista riojano, como este último ha denunciado en múltiples ocasiones.
Un gesto que ahora Galiano quiere que sea compensado con el apoyo gubernamental para intentar resistir en Unidad Editorial. Es verdad que poco puede hacer Rajoy en una eventual salida del Presidente Ejecutivo del Grupo, pero en estos momentos cualquier ayuda es bien recibida y más si viene desde las más altas esferas políticas. Pero no es el único apoyo, Galiano también ha hablado con empresarios y cercanos en el mundo político y social, para intentar sondear una posible compra del diario El Mundo, en el caso que finalmente se decida prescindir de él.
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