La inteligencia artificial es un tema que preocupa al presidente de Estados Unidos, Barack Obama. El mandatario considera que este es uno de los temas más espinosos que le tocará enfrentar a la administración que lo suceda al frente de la Casa Blanca, ya sea su colega Hillary Clinton o el propio magnate Donald Trump.
En Pittsburgh se celebró una conferencia realizada por la Casa Blanca, en la que intervino Barack Obama, cuyo tema central era la inteligencia artificial. En ella Obama tomó como ejemplo a Uber y sus coches de conducción autónoma, a los que ciertamente les encuentra la utilidad pero ve algunas desventajas.
“Un gran porcentaje de la población estadounidense se gana la vida conduciendo, así que es comprensible la preocupación de mucha gente por lo que esto pueda significar y como impacte”, dijo Obama en su intervención.
La Casa Blanca liberó un informe en el que habla del futuro de la inteligencia artificial en las distintas áreas de la sociedad y en el sector económico, en el que resaltan que si bien el uso de esta tecnología impactará positivamente en los beneficios para las empresas, ciertamente la robótica podría terminar desplazando trabajadores o incluso el uso de algoritmos podría crear sesgos de opinión por ejemplo en el segmento de vigilancia policial.
De acuerdo con el sitio Technology Review, la conferencia hecha en Pittsburgh concluye dejando un mensaje de impacto positivo de la inteligencia artificial en la sociedad, de hecho los investigadores hablaron sobre el uso de máquinas de aprendizaje para construir sistemas inteligentes de tráfico, optimizar los diagnósticos médicos y hasta proteger la vida silvestre.
Pero fuera del set de conferencias, los comentarios de los asistentes se enfocaban en la real preocupación por lo que pueda significar la masificación de la inteligencia artificial, la responsabilidad del gobierno siguiente – ya sea Clinton o Trumo el que gane las elecciones – y como la llegada de este desarrollo puede impactar negativamente en la tasa de desocupación en el país americano y seguidamente en el mundo.
La Casa Blanca considera que las próximas administraciones deberán dedicarse a promover controles sobre el crecimiento de la inteligencia artificial, así como sobre su evolución y despliegue para evitar que pueda afectar el bienestar humano. ¿Están realmente preparados los equipos de Hillary Clinton o Donald Trump para enfrentar este problema?
Investigadores académicos y organizaciones económicas que asistieron al evento coincidieron con la preocupación del Presidente estadounidense al manifestar que están en desconocimiento de cómo la inteligencia artificial y la automatización puede erradicar puestos de trabajo y aumentar la desigualdad laboral.
La llegada de la inteligencia artificial requerirá nuevas regulaciones
Andrew Moore, decano de la Facultad de Informática de la Universidad Carnegie Mellon, señaló manifestó que le preocupa que empresas como Tesla se están moviendo de una forma muy agresiva para comercializar la conducción automatizada, lo que finalmente acabará con un montón de puestos de trabajo.
Para él, se deben establecer controles que permitan minimizar los riesgos de errores que puedan ser mortales. El gobierno estadounidense ya ha comenzado emitir directrices para los coches autónomos y toda la tecnología relacionada, sin embargo no son suficientes.
En España Tesla apenas está considerando su llegada para comenzar a vender sus coches en nuestro país. Sin embargo nuestro país podría tener cierta ventaja sobre el resto de Europa, debido a que nunca ratificó la Convención de Viena, al igual que Estados Unidos y Portugal. Este documento, que data de 1968, indica que todos los vehículos conducidos por las carreteras deben tener un conductor. Al no haberlo firmado, España podría convertirse en un eje de prácticas dentro de Europa para testear esta nueva tecnología.
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