¿Puede Podemos poner contra las cuerdas a RTVE con una denuncia ante la Comisión Europea sobre la falta de independencia y pluralismo en la televisión pública de nuestro país?. Esta ha sido la última iniciativa que se ha promovido desde la formación morada, que a través de su eurodiputada Tania González, ha instado a la Comisión Europea a que investigue si en la radio televisión pública de nuestro país se cumple el marco legal que se dicta desde Europa. Con ello, se pretende vigilar si en TVE se desarrolla el pluralismo y la independencia acorde a la normativa europea en los medios de comunicación.
En esta iniciativa, la formación que lidera Pablo Iglesias no está sola. Desde el Consejo de Informativos de RTVE se han sumado a esta iniciativa de Podemos complementando varios años de quejas y denuncias que han acumulado desde este organismo. Vienen de largo las denuncias de este Consejo ante la manipulación que existe en la corporación pública, fundamentalmente en los años de gobierno del Partido Popular. Desde el Consejo de Informativos, presidido por Fernando Caballero, han sido innumerables las denuncias y campañas que se han desarrollado para alertar del giro que han tomado los Servicios Informativos de la televisión pública en los últimos años.
También se suman a esta denuncia ante la Comisión Europea la Federación de Sindicato de Periodistas, la Plataforma en Defensa de la Libertad de Información, Teledetodos y sidicatos como UGT, USO, CGT y CCOO. Todos ellos han unido fuerzas ante una idea clara: la programación informativa de RTVE está ligada a los intereses gubernamentales y no fomenta una información independiente en un medio de comunicación público. El mensaje de la eurodiputada de Podemos, Tania González, es claro: “el retroceso en independencia y en pluralismo en los medios de comunicación públicos durante los gobiernos del PP ha sido bochornoso”.
RTVE afronta las acusaciones de Podemos en su peor momento
A pesar de estar celebrando el 60 aniversario de la creación de TVE, la televisión pública está para pocos festejos. Los números no mienten y a las acusaciones de falta de independencia en sus Servicios Informativos hay que sumar una larga lista de argumentos negativos que amargan el cumpleaños a la corporación pública.
Los índices de audiencias siguen siendo los peores de su historia, cuando a duras penas La 1 logra superar un share mensual del 10%. A esto hay que sumar la pérdida de liderazgo y credibilidad que ha sido cuestionado por los propios trabajadores de la cadena pública, por diferentes partidos políticos y por numerosos agentes sociales.
Pero no es el único foco de problemas. En el terreno económico las cosas no van mejor. En los últimos seis años RTVE ha tenido que afrontar pérdidas que han superado los cien millones de euros, que ha tenido que afrontar el Estado, y en la actualidad tiene que hacer frente a una amplia plantilla que supera los 6.000 trabajadores. Factores como este, se unen al principal foco de preocupación: la falta de libertad, transparencia y el servilismo gubernamental. Ahora, tendrá que ser la Comisión Europea quien se pronuncie.
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