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¿Crees que lo has visto todo en el mundo de las pantallas? Pues un grupo de investigadores de la Universidad de Tecnología de Delft en los Países Bajos no cree que así sea. Han descubierto una tecnología que seguramente podrá ser explotada en 2017: se trata de los píxeles de burbujas de grafeno.
Su investigación ha dado como resultado que las burbujas de grafeno tienen la propiedad de cambiar de color en la medida en la que se expanden y contraen, produciendo un proceso mecánico que puede hacer más eficientes, flexibles y duraderas a las pantallas LED.
Sin embargo estos investigadores reconocen que su trabajo sobre las burbujas de grafeno se encuentra en una fase muy exploratoria y hay mucho camino que recorrer para poseer una tecnología estable.
De acuerdo con el sitio The Verge, el descubrimiento fue realizado por un grupo de científicos que trabajan con paneles de óxido de silicio cubiertos con grafeno, que son láminas de carbono puro con sólo un átomo de espesor.
El experimento consiguió crear en el silicio agujeros de aproximadamente diez veces el ancho de un cabello humano, dejando que el grafeno se extendiera a través de estas pequeñas cavidades como un tambor.
Al manipular estas muestras, los científicos notaron que las burbujas de grafeno cambiaron de color dependiendo de la presión que se ejercía dentro de las cavidades, es decir que si la presión se desplaza, las burbujas se vuelven cóncavas o convexas, modificando la retractación de la luz por medio de ellas, creando así diferentes colores.
Santiago Cartamil-Bueno, investigador de la Universidad de Tecnología de Delft señaló en una entrevista a The Verge: “El grafeno en principio es transparente; es tan delgado que la luz no puede reflejarse, pero estábamos usando una capa doble de grafeno, y eso refleja más y dependiendo de la profundidad de la cavidad hay interferencias diferentes, y de esto se obtienen diferentes colores de luz”.
Este resultado es conseguido con el mismo principio utilizado en la tecnología Mirasol de Qualcomm, que emplea membranas reflectantes controladas por medio de electrostática.
La razón por la que este tipo de pantallas LED “corregidas” con pixeles de burbujas de grafeno serían más eficientes energéticamente es porque toda vez que la imagen ha sido ajustada no necesita energía adicional para mantenerla.
Aún falta mucho trabajo con los píxeles de grafeno
Hasta ahora los cambios de color sólo se han observado por medio en un microscopio, por la sencilla razón de que es difícil y costoso fabricar muestras de grafeno en un mayor tamaño. Los píxeles resultantes son tan pequeños, que se necesitarían cientos de miles para crear incluso una imagen diminuta, y las burbujas no pueden hacerse más grandes por temor a estallar.
El otro aspecto importante para que esta investigación pueda prosperar es que los ingenieros todavía tienen que trabajar en cómo crear colores puros de las burbujas de grafeno.
Por ahora, el siguiente paso para los científicos es investigar una manera para controlar con exactitud los cambios de presión en las cavidades individuales en las que se generan las burbujas de grafeno. Tienen previsto tener una pantalla de burbujas de grafeno lista para mostrar en su conferencia del Mobile World Congress 2017.
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