Los sistemas de monitorización estándar de personas mayores en el hogar son efectivos en un 70% de los casos, pero hay un 30% de accidentes domésticos que todavía se escapan al control de los pulsadores oficiales. Por esta razón y con el fin de ofrecer una solución completa para el sector, Ibermática ha desarrollado a través de su Instituto de Innovación i3B el proyecto REAAL, basado en Internet de las Cosas y la analítica de datos inteligente.
Esta iniciativa ofrece la posibilidad de monitorizar la actividad de las personas mayores a través de sensores no invasivos y analizar los datos extraídos. En base a esta información, y mediante técnicas de Inteligencia Artificial, el sistema aprende automáticamente los comportamientos del habitante, con lo que establecen determinados patrones que puedan representar una emergencia. Cuando la solución detecta una situación de riesgo basada en evidencias, envía una alerta a los sistemas de emergencia o a los cuidadores principales.
La monitorización, que se hace mediante sensores no invasivos de bajo coste (entre 10 y 30 euros), se basa en el movimiento, como por ejemplo, el del cierre y apertura de puertas, o la detección de humo y gas. Una vez recogida la información, los datos se tratan de manera inteligente y, si hay evidencia de emergencia, saltan las alarmas y los avisos, que pueden llegar tanto a los servicios de emergencia como a los cuidadores principales en tiempo real. De esta manera, el sistema es capaz de diferenciar si hay humo en la cocina porque el usuario ha encendido una sartén o por un incendio, si la persona lleva más tiempo del necesario en el baño (alerta ante caídas), o si no ha salido de casa y no hay movimiento durante horas.
Un proyecto hecho realidad
REAAL ha sido instalado como proyecto piloto en casi un centenar de hogares, fundamentalmente del País Vasco (80%), en asociación con Servicios Sociales Integrales (SSI), una de las empresas especializadas en ayuda a domicilio de Vizcaya. El proyecto también estuvo implantado de forma temporal en uno de los centros residenciales de Igurco con el objetivo de detectar movimientos anómalos en sus 150 habitaciones y establecer avisos automáticos de emergencia para los profesionales de enfermería. Los sensores inalámbricos usados tienen una medida de 15×15 centímetros y se conectan a WiFi o a una red interna que transmite la información. El proyecto está en constante desarrollo y desde iB3 se siguen añadiendo funcionalidades de forma progresiva.