LG ha dado a conocer que trabaja para mejorar la seguridad de sus dispositivos, una vez que el incidente del Galaxy Note 7 afectó en general a toda la industria de teléfonos móviles.
“Vamos a mejorar significativamente la seguridad y la calidad de nuestros nuevos teléfonos inteligentes insignia a medida que más consumidores buscan smartphones seguros”, dijo a The Korean Herald Lee Seok-jong, del grupo de operación de comunicaciones móviles de LG Electronics.
Este diario da por sentado que el LG G6 se lanzará en el Mobile World Congress, que tendrá lugar en Barcelona el último fin de semana de febrero. La compañía sí aseguró que ahora sus dispositivos tendrán “tubos de calor” que permitirá dirigir el calor del teléfono lejos de las zonas que más se calientan para evitar fallos, recalentamientos y explosiones.
Una tecnología similar fue utilizada por Samsung para el Galaxy Note 7, aunque LG asegura que este formato de refrigeración ha sido probado y comprobado para hacer de su próximo buque insignia un teléfono seguro que todos querrán utilizar.
La compañía aseguró hace unas semanas que el LG G6 no será modular como el LG G5, por lo cual ahora se espera un teléfono con otras novedades. Algunos rumores dicen que será de 5.7 pulgadas y que lo más probable es que cambie el ratio de la pantalla de 16:9 a 18:9, aunque desde luego esta información no está confirmada, y habrá que esperar hasta el lanzamiento del dispositivo para poder confirmarlo.
Por otro lado, este mismo mes se espera que Samsung entregue el informe del Galaxy Note 7, en el que la empresa explique cuales fueron las causas que originaron las explosiones. Una filtración de Reuters dice que Samsung dirá que la batería fue la causante de la mayoría de los problemas en un reporte que podría publicar el 23 de enero.
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