RTVE ha comenzado 2017 como acabó el año pasado: llena de incertidumbres. En febrero se vuelven a reunir las Cortes, pero de momento no hay ninguna noticia de que se quiera abordar la situación de la cadena pública, ni el relevo de su actual Presidente, ni las necesarias reformas de su actual sistema de financiación. PSOE, Ciudadanos y Podemos firmaron en la anterior legislatura un documento para pedir volver al antiguo sistema de elección del Presidente, pero la urgencia de otros temas y la imposibilidad de un acuerdo político hace imposible un relevo en el mediano plazo.
Desde el Partido Popular se confía en José Antonio Sánchez y el objetivo es que el actual presidente de RTVE agote su mandato. Leopoldo González Echenique fue elegido a mediados de 2012 y renunciaba en septiembre de 2014. Sánchez era nombrado como sustituto en octubre de ese mismo año con la misión de agotar el mandato de seis años de Echenique. De esta manera, Sánchez legalmente debe permanecer como Presidente de la Corporación hasta julio de 2018.
Ello, a no se ser que se produzcan situaciones excepcionales como un acuerdo entre los grupos políticos para sustituirle o su renuncia voluntaria. En el primero de los casos se debería producir una negociación que en estos momentos está lejos de concretarse. En primer lugar, el PP con mayoría simple quiere que Sánchez se quede y en segundo lugar no parece que, dados los acuerdos parlamentarios de investidura, Podemos, PSOE y Ciudadanos se pongan de acuerdo para relevarle y buscarle un sustituto.
Se requeriría un amplio consenso del arco parlamentario que a estas alturas parece imposible. Y en cualquier caso la prioridad de partidos como Podemos es el cambio del sistema de elección, lo que podría retrasar en varios meses un hipotético acuerdo para relevar a Sánchez de RTVE, dadas las discusiones y trámites parlamentarios que implicaría abordar una reforma de este tipo.
En relación a una eventual renuncia de Sánchez –algo que se ha comentado en algunos medios de Comunicación- desde el entorno del actual Presidente se desmiente tajantemente que el actual Presidente quiera marcharse porque esté descontento en el cargo. De hecho, su interés -al igual que el PP- es agotar su mandato. Es cierto que Sánchez y todo su equipo están intranquilos porque esperan a que se resuelva cuando antes el nuevo sistema de financiación de RTVE, pero los crecientes índices de audiencias, la estabilidad en la parrilla y la mejora de las cifras de los telediarios han dado un respiro a la Corporación y a su equipo directivo.
La prioridad, cambiar el sistema de financiación
Pese a ello, desde la Corporación se advierte que el sistema de financiación debe ser la prioridad de los políticos respecto de RTVE, mucho más que el nombramiento de un nuevo Presidente o de la manera en que éste se elija. RTVE tiene evidentes problemas para financiarse, tanto por el dinero que ingresa, que desde el punto de vista Estatal lleva congelado tres años, como desde las limitaciones para poder gastar estos recursos. RTVE mantiene una serie de restricciones que no están resueltas y que genera una serie de incertidumbres que impiden trabajar al equipo de gestión de la Pública. De hecho, en ocasiones anteriores desde la propia TVE se ha reconocido que “no queda mucho margen de maniobra” en la Corporación.
¿Cuándo se reunirán las fuerzas políticas para hablar de RTVE? De momento, no hay ninguna reunión programada ni acercamiento que se haya filtrado de manera oficial. Las diferentes fuentes consultadas tanto en RTVE como entre los partidos indican que la voluntad está, pero que en el corto plazo no hay programada ninguna reunión ni acercamiento informal para tratar ninguno de estos temas. Desde los partidos reconocen que, a pesar de que RTVE estuvo en todos los acuerdos de investidura como uno de los puntos reseñables, aún quedan muchas prioridades parlamentarias por cerrar como el Pacto por la Educación o los Presupuestos Generales del Estado.
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