Los equipos de asuntos públicos de Grayling en España y Francia han analizado el impacto de la aplastante victoria de en las elecciones presidenciales en Francia, celebradas este pasado domingo. Dorothée Dayraut Jullian y David Simón Santiñán, directores de Asuntos Públicos en Grayling, apuntan a la dificultad del movimiento En Marche! para conseguir la mayoría en las elecciones legislativas del próximo mes de junio.
El 66,06% del electorado francés, algo más de 20 millones de votos, han elegido a Emmanuel Macron como nuevo Presidente de la República Francesa para los próximos cinco años. La gran perdedora de la noche ha sido Marine Le Pen del Frente Nacional (FN). Así, Macron, quien creó el movimiento En Marche! hace apenas un año, se convierte en el presidente francés más joven de todos los tiempos y uno de los líderes más jóvenes de todo el mundo. El éxito de Macron, según los analistas, se ha debido a que ha aglutinado los votos tanto del gran número de partidos que se unieron bajo el movimiento, como el respaldo de François Bayrou del Movimiento Democrático, así como muchos otros del Partido Socialista, pero también un número significativo de políticos centristas y de centro derecha y de las transferencias de votos del electorado de François Fillon.
La otra cara de la victoria de Macron es el 33,94% de los votos que consiguió Marine Le Pen, que a pesar de no ganar consiguió la mejor puntuación para un candidato del Frente Nacional (11 millones de votos) en unas lecciones. La tasa de abstención, estimada en un 25,3%, también es otro de los datos más relevantes de la noche electoral siendo la más alta de unas elecciones presidenciales francesas desde 1969. De este modo, las cifras reflejan el número relativamente grande de franceses que se sintieron incapaces de votar por ninguno de los candidatos, o bien no lo hicieron, o lo hicieron, pero registraron su desaprobación de la elección que se les estaba ofreciendo, recoge el informe elaborado por los equipos de Asuntos Públicos de Grayling en España y Francia.
¿Y ahora qué?
Es la gran pregunta que media Europa se hace en estos momentos. Si bien Macron acaba con cualquier aspiración rupturista de la unidad europea de la que era valedora Le Pen, surgen muchas dudas respecto al poder e influencia de Macron en el marco de una Europa cada vez más fragmentada. “Macron es un europeísta convencido y llega en un momento clave. Tras el voto por el Brexit en Reino Unido y el ascenso de Donald Trump a la presidencia estadounidense en noviembre, las elecciones en Francia habían tomado un volumen de atención internacional sin precedentes, Macron se lo jugaba todo contra Le Pen cuando justo unos meses antes Austria pasaba por una situación parecida”, destaca David Simón Santiñán, responsable del trabajo y Director de Asuntos Públicos de Grayling en España.
Desde los equipos de Grayling en España y Francia señalan algunos puntos clave en los que podría centrarse el gobierno de Macron en sus primeros meses de mandato. Entre las reformas estrella que Macron ha ido anunciando a lo largo de su campaña destacan una reforma de la legislación laboral o medidas para impulsar a las PyMES. En cuanto a Europa, Emmanuel Macron ha tenido un discurso muy positivo sobre la UE durante la campaña. En particular, el nuevo Presidente de Francia apoya un mercado único profundamente integrado, especialmente en cuestiones digitales para fomentar la aparición de un “Google europeo” y la necesidad de compartir normas, especialmente en el ámbito del medio ambiente.
Macron, según los analistas, es el candidato favorable a las empresas. Entre sus medidas, destacan la rebaja de los impuestos a las grandes empresas desde el 33,3% al 25%. También propone un programa de inversión de 50.000 millones de para promover las energías renovables, modernizar la agricultura y apoyar la formación y la innovación médica; y un fondo de 10.000 millones de euros con participaciones estatales de empresas que cotizan en bolsa para financiar las industrias del futuro.
“Actualmente Francia es el primer socio comercial de España y el primer país de acogida de las inversiones españolas que crean empleo que en 2015 representaron el 33% de los proyectos españoles dirigidos hacia Europa”. Así analiza el director de asuntos Públicos de Grayling las relaciones de España y Francia con la victoria de Macron: “Su triunfo garantiza la buena relación bilateral con España que se han consolidado en los últimos años. Macron es conocido por varios de los miembros del actual gobierno Español, por su época como titular de Economía y Hacienda y cuando fue secretario general adjunto en el Elíseo. La relación de España y Francia ha sido cordial durante los últimos años y la victoria de Macron debería fortalecer aún más la cooperación en materia económica, de seguridad ante el reto del yihadismo en la lucha contra ETA”, explica David Simón Santiñán desde Grayling
El nuevo Gobierno de Macron
El primero de los retos inmediatos de Macron será la creación de un gobierno en los próximos días. Este ejecutivo estará formado por 15 ministros. Sin embargo, aún no ha revelado el nombre de su Primer Ministro, aunque ha dicho que podría ser una mujer que tiene la capacidad de líder. Quiere a alguien con una fuerte experiencia política, un buen conocimiento del proceso parlamentario y la capacidad de administrar una mayoría, se recoge en el informe de Grayling. Pero este gobierno podría ser totalmente modificado con las elecciones legislativas que tendrán lugar un mes después de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, es decir, el 11 de junio y el 18 de junio. Precisamente las elecciones legislativas serán en siguiente gran reto de Macron, en las que el poder de En Marche! podría quedar mermado. La falta de estructura del movimiento político de Macron es uno de los puntos en los que tendrá que trabajar el nuevo Presidente de Francia. A día de hoy es muy difícil hacer proyecciones legislativas ya que En Marche! no ha dado a conocer todos sus candidatos a las elecciones legislativas.
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